Los propietarios de mascotas de Benissa están alarmados. Tras morir hace varias semanas nueve perros envenenados al ingerir cebos que podrían ser de estrictina en partidas rurales del municipio, ahora otros tres canes han fallecido por la misma causa. La protectora de animales Bèrnia-Benissa ha denunciado la aparición de más trampas de veneno. De hecho, este colectivo está colocando carteles que advierten del peligro en zonas como la Serra d'Oltà.

Precisamente, es ahí donde se ha hallado al último perro muerto, que estaba tirado en la cuneta de un camino rural y no llevaba collar. Este animal lo descubrieron los dueños de Mara, el can que se ha salvado tras ingerir una trampa de comida con ponzoña. Los casos de perros intoxicados, no obstante, están ocurriendo en prácticamente todas las partidas de Benissa.

Los dueños de Mara descubrieron que su mascota acababa de comer un trozo de comida tirado en el campo y, en seguida, sospecharon de que podía ser tóxico. De ahí que llevaran a toda prisa al perro a un veterinario. Esta rápida actuación le salvó la vida.

El Seprona está investigando la colocación de los cebos envenenados.