El Ayuntamiento de Vilamarxant ha anunciado que derribará más de 700 nichos que se encuentran en estado de ruina en su cementerio municipal para evitar posibles accidentes. Según indicaron fuentes municipales, el consistorio ya ha iniciado también los trámites para desalojar las alrededor de 120 sepulturas de estas tumbas que todavía permanecen ocupadas.

Este camposanto se construyó a principios del pasado siglo XX, y con el paso del tiempo han ido apareciendo diversos problemas en su estructura provocados por el desgaste de los materiales empleados para levantarlo. Como consecuencia de este deterioro se procedió en 2009 a la declaración del estado de ruina de más de 700 de sus nichos, por lo que ya se inició el traslado de los restos humanos que quedaban en buena parte de ellos.

Ahora, el Ayuntamiento de Vilamarxant ha optado por dar una solución definitiva a estos nichos derribándolos. En concreto, los afectados son los que comprenden las columnas de la 1 a la 24, de la 25 a la 103, de la 104 a la 129 y la nave central noreste del cementerio. Desde el consistorio, además, han recomendado para este día 1 de noviembre de Todos los Santos que los visitantes del cementerio vayan con precaución al acceder a las zonas delimitadas por su precario estado.

En cuanto a las sepulturas que todavía albergan los nichos que se encuentran en grave estado de deterioro -unas 120-, las mismas fuentes señalaron que los servicios municipales instarán a los familiares de las personas enterradas en ellos a que soliciten de inmediato sus restos y puedan ubicarlos donde estimen oportuno, para así poder proceder al derribo.