Pego quiere seguir fortaleciendo la agricultura. Para ello el Ayuntamiento ha decidido apoyar dos proyectos con los que se pretende potenciar el sector y conseguir que la gente joven se decante por el mundo agrícola. El primero de ellos es la creación de un banco de tierras, una propuesta que se ha puesto en marcha con la ayuda de Buscatierras, una agencia de dinamización rural que fomenta la estimulación económica, cultural y social del entorno rural.

El equipo técnico de Buscatierras ha elaborado un estudio para determinar cual es el estado de las tierras de cultivo en el término municipal con el objetivo de crear un banco de tierras, un servicio de gestión del suelo no urbanizable. Una propuesta presentada ayer en la Casa de Cultura. Según revelan los datos, en la actualidad en Pego hay alrededor de 1.500 hectáreas cultivadas, aproximadamente el 40% de las parcelas cultivables. Un porcentaje, apuntan los técnicos que han realizado el estudio, muy superior al del resto de municipios de la comarca y la provincia.

En cuanto a las parcelas agrícolas abandonadas, actualmente son 735 hectáreas. Pese a ser una cifra baja, según los técnicos, el problema es que dichas parcelas son “de dimensiones pequeñas y están separadas, lo que complica la mecanización del sector en el municipio”. Con el proyecto del banco de tierras, el objetivo es conseguir recuperar las parcelas abandonadas así como agruparlas para conseguir cultivos más extensos. Para ello desde Buscatierras han habilitado un apartado en su web en el que los propietarios pueden facilitar los datos de las tierras para cederlas, “ya sea de forma gratuita y desintaresada o a través de un arrendamiento para que otras personas puedan cultivarlas”.

El banco de tierras no fue el único proyecto presentado ayer en la Casa de Cultura. Desde la Cooperativa de Pego también se propuso apostar por conseguir un producto de alta calidad. Para ello apuestan por reducir los tratamientos fitosanitarios y sustituirlos por alternativas más naturales con el objetivo de aumentar la biodiversidad para combatir las plagas “con sus propios depredadores”, matizó Pepe Pastor, el presidente de la Cooperativa.

Pastor además remarcó la importancia de conseguir cultivos más extensos, “tenemos que intentar reducir los minifundios”, además de atraer a los jóvenes al sector “facilitando su incorporación con asesoramiento y ayudas técnicas”.

“Pego ha sido un pueblo tradicionalmente agrícola y creemos que el sector debe se fuerte, pero para ello debemos mejorar y adaptarnos a los nuevos tiempos, hacer que sea más atractivo y fácil trabajar en el campo”, concluyó el alcalde, Enrique Moll.