Un grupo de ballenas rorcuales sorprendió ayer a las tripulaciones de las embarcaciones que estaban fondeadas en la cala Sardinera de Xàbia. Las ballenas, de entre 15 y 20 metros, se deslizaron entre las barcas. Los privilegiados que pudieron disfrutar del espectáculo vieron como emergían y resoplaban por el espiráculo.

"Fue impresionante; todos nos quedamos en shock, maravillados", ha comentado a Levante-EMV Daniel Lizana, quién pudo grabar a los rorcuales.

Las ballenas se arrojaron a la Sardinera sobre las 21 horas. El sol ya se había ocultado tras el Montgó. El mar era un espejo. Los navegantes, conocedores ya de que no hay que importunar a estos grandes cetáceos (el rorcual es el segundo animal más grande del planeta tras la ballena azul), no pusieron en marcha los motores de las barcas. Simplemente observaron y disfrutaron. Daniel Lizana ha explicado que el divisó dos rorcuales. "Quizás había más. Esos dos pasaron tranquilamente por una zona donde hay bastante calado y no podían quedar varadas. Nadie los molestó. Fue increíble ver tan de cerca a las majestuosas ballenas".