Una inquilina de un piso del Port de Sagunt que llevaba años sin pagar el alquiler acabó ayer en el hospital comarcal tras ser desahuciada de la vivienda en la que residía.
Los hechos se producían cerca de las 9.30 horas, cuando esta vecina tenía que cumplir la orden de alzamiento emitido por el juzgado como resultado a una sentencia judicial.
En el momento del desalojo, la inquilina, bastante nerviosa, amenazó con autolesionarse si no le daban una solución, unos hechos que no llegaron a producirse pero que acabaron con la afectada en el hospital dado su estado. Una vez estaba en observación, la mujer confirmó a Levante-EMV que «estaba triste» y pendiente de que le evaluaran los médicos.
La mujer llevaba desde principios del año 2000 alquilada en este inmueble, pero en los últimos tres años había dejado de pagar, arrastrando una deuda con el dueño del piso que supera los 12.000 euros entre rentas y gastos de luz y agua.; unos últimos pagos a los que ha tenido que hacer frente la propietaria para evitar el corte del suministro.
Tras varios intentos para que cumpliera con sus obligaciones, fue a finales de 2014 cuando se interpuso una demanda de desahucio por parte de los propietarios, a la que se opuso la inquilina. Tras un juicio oral, donde se acreditaron los impagos, la sentencia dio la razón a la propietaria y ayer por la mañana, esta vecina tuvo que dejar la que ha sido su casa en los últimos quince años. «¡Nunca pensé que me iba a ver en esta situación!», decía la mujer.
