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El Síndic de Greuges censura a Gilet por negar información a sus vecinos

El defensor del pueblo valenciano reclama transparencia ante varias quejas urbanísticas

El Síndic de Greuges ha requerido al Ayuntamiento de Gilet que adopte «las medidas necesarias» para evitar una «situación de riesgo» en referencia a la existencia de dos badenes de casi tres metros de altura en la urbanización La Paz. Pero además, el organismo encargado de velar por el cumplimiento y respeto de los derechos y libertades de los ciudadanos, acusa al consistorio de incumplir la ley de Transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno, al no contestar en los plazos requeridos a la solicitud de información presentadas por un vecino de esta urbanización en relación a este asunto, por lo que le pide que en un mes «dicte resolución motivada en contestación a las solicitudes de información realizadas por el autor de la queja», tales como si el ayuntamiento ve peligrosidad en la zona, qué va a hacer al respecto, y si es competencia de la administración local actuar al tratarse de un vial público.

En el escrito de queja, el presidente de la urbanización La Paz describe el peligro que supone tanto para viandantes como ciclomotores y bicicletas el seguir manteniendo el desnivel entre los dos viales de la Avenida Rambleta y Penyetes ante el riesgo de caída, explica.

Por su parte, desde el ayuntamiento responden que se ha dado cumplida información, contestación que el Síndic niega en su escrito. El alcalde de Gilet afirmaba a Levante-EMV que «ya les comunicamos que la parcela no era de titularidad municipal», aclaraba, Salva Costa.

Este no es el único toque de atención que el Síndic da al ayuntamiento de Gilet por no contestar a la información requerida de los ciudadanos. En respuesta a otra queja vecinal, también de la Paz, el organismo recrimina el mismo hecho. En este caso, un vecino reclamaba una contestación municipal ante la presunta recalificación urbanística de una parcela ubicada en la avenida Mediterráneo 64 de esta urbanización, que ha pasado de ser residencia a industrial, expone el autor de la queja. En este documento se pide al consistorio «acceder al expediente administrativo por el que se acordó el cambio de uso residencial a uso industrial» sin que nadie lo hubiera comunicado, pese a ser la parcela propiedad de la comunidad de vecinos de La Paz. Aunque en el Plan General (PGOU) los terrenos no han sufrido un cambio de calificación, en el recibo del IBI éstos aparecen como suelo industrial.

El documento del Síndic también pone de manifiesto que la primera queja se interpuso en enero de este año y que todavía hoy no se ha obtenido la información solicitada. Sin embargo, desde el consistorio lo niegan y aseguran que «el asunto ya se le explicó» al presidente de la urbanización. «Esta parcela era del ayuntamiento y cuando la comunidad se la inscribió a su nombre, Catastro le dio un tratamiento de industrial para cobrar el pertinente impuesto (IBI), pero a efectos del Plan Generar no se ha cambiado su calificación», explicaba el mandatario de Gilet.

En este caso, el Síndic de Greuges vuelve a recomendar al consistorio que aporte la información requerida por el vecino que ha interpuesto la queja en el plazo de un mes.

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