Funcionarios, políticos y vecinos guardaban ayer un minuto de silencio en señal de protesta por los presuntos asesinatos machistas ocurridos el viernes 8 de febrero en Alcalá de Henares (Madrid) y el pasado sábado 9 de febrero en Planes (Alicante). Varios paros se sucedieron a las puertas de los edificios municipales para mostrar su repulsa contra esta lacra social que sigue matando.