La decisión del Consell de aplazar la aprobación del paraje natural municipal de la montaña de Romeu levantó ayer ampollas en la alcaldía de Sagunt y, en pleno periodo preelectoral, reabrió viejas heridas, especialmente entre dos socios de gobierno local, Compromís y PSPV.
Al ver que la medida había caído del orden del día del pleno del Consell de ayer, el alcalde de Sagunt, Quico Fernández, reaccionó de forma airada contra los socialistas a nivel autonómico al achacar lo ocurrido a una petición de este partido «para estudiar bien el expediente y ver si hay una afección a los trabajadores». «Es una deslealtad institucional», dijo en referencia a que la propuesta había sido apoyada por la mayoría del pleno municipal. Incluso lo consideró «una traición a sus compañeros de partido que apoyaron la solictud en el pleno» y tuvo críticas hacia al nuevo candidato a la alcaldía, además de recordar que fue el PSOE municipal quien impidió hace más de diez años que esta medida saliera adelante en el pleno, tal y como querían sus socios de entonces, nacionalistas y EU.
«Nos deja perplejos, enojados. No aprobar esto está fuera del espíritu de Botànic pues la declaración de paraje lo que incluye es todo monte público, no tiene un efecto negativo en nadie... Es una exhibición de hipocresía mayúscula hacer ver que el gobierno del Botànic es verde y ser incapaces de aprobar algo tan básico como esto», apuntó el alcalde en una rueda de prensa que, un día antes, había convocado para anunciar la aprobación de la medida que luego no llegó a producirse.
A preguntas de Levante-EMV, el edil del PSPV-PSOE Miguel Chover consideró luego «despropocionadas» las palabras del alcalde y dejó claro que «ni había habido ninguna deslealtad, ni una traición».
Según apuntaba: «Sin querer entrar en ninguna polémica, lo que es evidente es que el PSPV de Sagunt y el autonómico están en la misma posición que antes. Apoyamos la protección del paraje», decía además de descartar que el asunto se hubiera eliminado del orden del día del pleno del Consell por las razones que había dado el alcalde. «Al preguntar lo que me han dicho, dista bastante de su versión. El jueves, en la reunión se secretarios y subsecretarios autonómicos surgió una duda a nivel jurídico que se quiere aclarar antes de aprobar la declaración. Eso pasa constantemente en la administración cuando se quieren hacer las cosas bien.Pero que conste que fue la Conselleria de Economía gobernada por Compromís la que pidió más tiempo para analizarlo, en algo avalado por todos, incluida la vicepresidenta Mónica Oltra».
Esperar una o dos semanas
El socialista, no obstante, se mostró «seguro» de que, «en una o dos semanas, el paraje podrá salir adelante. Entonces, cuando se apruebe, será un éxito de toda la ciudadanía», remarcaba sin ocultar que se había enterado a posteriori de la rueda de prensa convocada por el alcalde sólo con ediles de Compromís y su diputada Teresa Garcia, pero no con los otros grupos del gobierno local que también habían apoyado la medida en el pleno: EU, ADN Morvedre y PSPV.
Precisamente la diputada nacionalista incidió que «está fuera de toda duda el extraordinario valor de la montaña» y consideró que «no hay ningún motivo desde el punto de vista técnico y jurídicos» para oponerse al paraje «tras la escrupulosa tramitación seguida, pues se han hecho hasta dos periodos de exposición pública, cuando a veces solo se hace uno», destacó. «Romeu es único en el litoral, al ser un bosque maduro. Hace tiempo debería haber tenido esa proteccción», remarcó.
