Lejos de que los sindicatos acerquen sus posturas para hacer frente común en las negociaciones con la dirección de ArcelorMittal, los reproches entre CC OO y UGT suben de tono, después de que el primero haya vuelto a convocar paros de dos horas durante la segunda quincena de este mes como forma de presionar a la multinacional siderúrgica para que retome las conversaciones por el acuerdo marco.
Fuentes de CC OO insisten en acusar a UGT de «romper la unidad de acción» al abrir la mesa negociadora del convenio en Asturias sin consultas previas al resto de sindicatos ni asambleas de cada centro, actitud que «debe obedecer a algún tipo de interés» y conduce a los trabajadores de ArcelorMittal en toda España, incluida la planta de Sagunt, a «renunciar a tener unas condiciones iguales de jornada e incrementos salariales, jubilaciones parciales o entrada de personal, al obligar a la negociación individualizada y a la baja tanto ahora como en el futuro».
CC OO reitera que su convocatoria de movilizaciones responde a «tener un marco regulador común, con condiciones justas y dignas para todos los trabajadores de las diferentes plantas, y no estar abocados a una guerra desigual centro a centro, donde la vulnerabilidad debido al desvío de producciones y otras artimañas dificultan la consecución de mejoras salariales y sociales».
Respuesta de UGT a CC OO
La réplica desde UGT no se ha hecho esperar. Además de considerar que la negociación del acuerdo marco, que «siempre hemos defendido como herramienta ideal», sí finalizó sin acuerdo y de negar que sus representantes se levantaran de la mesa, el sindicato asegura que su único interés es el bienestar de los trabajadores de la planta de Sagunt.
Respecto a los paros, UGT señala que «al mantenerse los motivos de las movilizaciones de octubre, nuestra respuesta es el mismo no, al igual que el resto de sindicatos a excepción de CC OO», que, según señala «se negó a que el pleno del comité de empresa votara sobre los paros. Cuando has tenido la mayoría es fácil, pero cuando no la tienes debes aceptar que algunas propuestas se rechacen».
Además de apuntar que los acuerdos por centros que se están alcanzando «contemplan una subida salarial del 5,6 %, así como mejoras sociales como el contrato de relevo o diversas ayudas», UGT admite el creciente «clima de tensión» entre los trabajadores y pide a sus afiliados que «no entren a ningún tipo de provocación que conduzca al enfrentamiento», entre los propios empleados.
