Aumenta el depósito de enseres en las zonas de segunda residencia

El depósito de enseres en la vía pública comienza a ser un problema ya que supone posibles focos de infección, tal y como han advertido varios alcaldes de la comarca.

El éxodo de algunos vecinos a sus segundas residencias, principalmente de montaña; las limpiezas que se ha llevado a cabo en algunas de éstas y también en viviendas habituales como medida, en muchos de los casos, para paliar el aburrimiento y ocupar el tiempo libre, ha generado un problema de enseres.

Pese al cierre de los ecoparques fijos y móviles y la suspensión de la mayor parte de lo servicios de recogida de voluminosos hay decenas de vecinos que siguen sacando sus trastos a la calle. Algunos los depositan al lado de los contenedores de basura, otros en la puerta de los ecoparques y los hay que los dejan en zonas de acopios ilegales.

Uno de estos problemas se encuentra en la urbanizaciones de Sant Esperit en Gilet, donde algunas zonas se han convertido en auténticos vertederos donde se deposita todo tipo de enseres. Mobiliario, electrodomésticos, colchones, ropa etc. Una situación que también se da en otras urbanizaciones de montaña, tal y como ha avanzado el alcalde, Salva Costa. «Es algo generalizado en las zonas de segunda residencia», afirmaba el mandatario

Estos hechos han obligado al presidente de la corporación a hacer un bando pidiendo «civismo» y prohibiendo el depósito de voluminosos en la vía pública». Esto también ha supuesto la puesta en marcha de un servicio extraordinario de recogida.

El alcalde de Estivella, Rafa Mateu, ya denunció esta situación a principios de semana, después de encontrarse montones de basura a las puertas del ecoparque.

En Albalat dels tarongers, la alcaldesa no ha podido suspender el servicio de recogida dada la cantidad de enseres que se acumulan en las zonas de montaña a los que se suman los restos de poda que se sacan a los contendedores. Maite Pérez hacía un llamamiento a la «ecorresponsabilidad» a no depositar voluminosos en la vía pública para evitar focos de infección y la posible propagación del virus.

En Sagunt, el problema se ha centrado en Almardà, sobretodo con la poda, aunque el gerente de la SAG lo califica de «hecho puntual» y recuerda que está prohibido depositar poda y enseres en la vía pública.