El Fertiberia BM Puerto y el BM Morvedre han sido dos de los 34 clubes de máximo nivel de la Comunitat Valenciana, a los que ha llegado la ayuda de la Fundación Trinidad Alfonso para paliar la crisis provocada por la covid-19.
Sin que se hayan hecho públicas las cantidades asignadas a cada entidad, más allá de la dotación al programa de 1,5 millones de euros «procedente del patrimonio personal de Juan Roig» y que se prolongará durante cuatro años, tanto los porteños como las saguntinas han reconocido que la inyección es «importante» hasta el punto de haber supuesto un «salto de calidad» en su plantilla gracias a la posibilidad que han tenido de reforzar sus equipos antes del comienzo de sus respectivos campeonatos.
Ese es el caso del Fertiberia, cuyo presidente, Juanjo Bataller, se muestra «muy agradecido» a la fundación, ya que «gracias a esta ayuda hemos podido realizar dos fichajes», en referencia a las recientes llegadas del argentino Lucas Aizen y el croata Bruno Kozina. El máximo mandatario rojiblanco añade que «haremos todo lo posible por ser merecedores de esta subvención y que la colaboración sea duradera».
Desde el BM Morvedre, mientras, su máximo mandatario, Jesús Amores, señala que «para nosotros es una ayuda muy importante, más si cabe por el momento en el que nos la concedieron, ya que nos permitió hacer maniobras para reforzar al equipo». Amores añade que «teniendo en cuenta la mala situación económica que arrastramos desde hace tres años y medio sin que las instituciones tomen cartas en el asunto, resulta fundamental que una fundación con la solvencia de esta nos garantice una inyección tan importante».
Tanto rojiblancos como saguntinas se ajustan a los requisitos de la Fundación Trinidad Alfonso en su búsqueda de fórmulas para contribuir a la reactivación y a la recuperación de los diferentes agentes que componen el «ecosistema deportivo» de la Comunitat Valenciana. Concretamente, este programa de Actívate Equipos persigue el doble objetivo de «evitar la fuga de talentos e impedir la desaparición de clubes de nivel tras la previsible falta de patrocinios».
