La reciente anuación judicial del Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral (Pativel), aprobado por el Consell el 4 de mayo de 2018, ha dejado sin «blindaje» adicional a un espacio de Sagunt cuyo desarrollo urbanístico quedó totalmente descartado con aquel decreto: El borde norte del Port de Sagunt, una zona no urbanizable situada entre el casco urbano de esta población y el río también conocida como «El Mamellot». No obstante, el edil de Urbanismo, Quico Fernández, deja claro que una iniciativa así «no tendría respaldo político, ni a nivel municipal, ni autonómico, porque no cabría en la nueva Ley del Territorio».
En realidad, la urbanización de esta pastilla nunca ha estado contemplada dentro del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Aún así, en 2010, durante el gobierno de PP y Segregación Porteña se impulsó la reclasificación de este suelo no urbanizable: Concretamente 350.000 metros cuadrados donde se habían proyectado construir 3.500 viviendas, pese al desacuerdo inicial de la asociación de propietarios de terrenos que veían abusivas las cargas urbanísticas que se les había aplicado pues, en un principio, debían pagar un nuevo puente hacia Canet d’ En Berenguer que luego el gobierno local aceptó retirar del PAI.
Pese a todas aquellas gestiones, finalmente, la operación urbanística falló y posteriormente, el Pativel vino a cerrar esta posibilidad. Aquella decisión fue entonces celebrada desde los partidos del anterior gobierno local que formaban Compromís, ADN Morvedre, EU y PSOE; de ahí que la sentencia que anula este plan no haya gustado nada al actual equipo que forman PSOE, Compromís y EU.
Como explicaba el edil de Urbanismo y exalcalde, Quico Fernández: «La sentencia del Pativel ha caído como una jarra de agua fría en Sagunt porque no se esperaba, no era previsible, una sentencia a estas alturas contra una ley que ha protegido, de manera muy necesaria, nuestra costa. Una costa que durante décadas ha sido destruida por la exagerada actividad urbanística, especialmente en algunas zonas», decía a preguntas de Levante-EMV.
Junto a ello, insistía en rechazar la urbanización de esa zona norte del Port que linda con el río Palància. «Éste era un desarrollo urbanístico que no tenía ninguna justificación. Más, en una ciudad que dispone de suelo de sobra pues, si alguna característica tiene nuestro Plan General (PGOU) es que, en su momento, en el año 1992 fue muy ambicioso en cuanto a la declaración de suelo urbano y no urbanizable y, por lo tanto, disponemos de suelo de carácter residencial de sobra para las próximas décadas. En este sentido, no creo que con la nueva ley urbanística pudiera prosperar pero, evidentemente, esperamos que el Pativel continúe preservando este espacio», apunta el concejal de Urbanismo, Quico Fernández, confiando en que pueda prosperar el recurso ya anunciado por el Consell.
Afección en Almardà
Esto último también permitiría despejar las dudas que también ha creado la anulación del Pativel respecto al SUNP 4, de la playa de Almardà, una gran pastilla en segunda línea de costa, donde el plan del litoral «en su día restringió el desarrollo ubanístico», como apuntaba el edil de Urbanismo .
Aún así, Fernández, apuntaba: «Mientras el Pativel esté vigente como está ahora, y lo estará durante mucho de tiempo, la situación será la misma. Además, hay que tener en cuenta que esta sentencia tampoco pone en entredicho ninguno de los aspectos más importantes del Plan, relacionados con la preservación del litoral, sino que son temas prácticamente de carácter formal y que no van a poner en entredicho la principal motivación y la gran aportación del Pativel que es, precisamente, la protección de un litoral que, ya de por sí, está muy degradado en la costa valenciana», afirma.
Junto a ello añade: «Esta sentencia no es todavía firme, la Generalitat evidentemente, anunció que va a recurrirla y que, por lo tanto, esperamos que, definitivamente el Pativel se quede tal y como está y que no pueda tener ningún tipo de incidencia retrospectiva sobre nuestra ciudad».
