El riesgo extremo de incendios forestales decretado ayer por el Centro de Coordinación de Emergencias en toda la Comunitat Valenciana llevó al Ayuntamiento de Estivella a suspender la marcha nocturna al Garbí que había previsto para esa noche, dentro del programa de las fiestas patronales.
Alrededor de cien personas se iban a dar cita en esta marcha que asciende hasta la cima por una senda del monte y luego vuelve a bajar por la carretera después de reponer fuerzas con horchata y fartons. Sin embargo, el ayuntamiento prefirió «evitar cualquier situación que pudiera poner en peligro» esta emblemática zona de la Sierra Calderona, como explicaba a Levante-EMV su alcalde, Rafa Mateu. «Esto va también en la línea de la resolución de la Conselleria de la semana pasada de evitar actividades incluso deportivas en los parques. Aquello fue por la ola de calor, pero ahora el alto riesgo de incendios también nos hace ser precavidos», decía asegurando que, con la actual situación, ya será el domingo 25 de septiembre cuando se hará otra marcha de este tipo, como estaba previsto, pero en esa ocasión, por el día.
