Ruby (Emilia Jones) es el único miembro oyente de una familia de sordos. A sus 17 años, trabaja por
la mañana con sus padres y su hermano en Gloucester, Massachusetts, antes de ir a clase, tratando
de mantener a flote el negocio pesquero familiar.
Ávida de encontrar nuevas aficiones, Ruby decide probar suerte en el coro de su instituto, donde no
sólo descubre una latente pasión por el canto, sino también una fuerte atracción física por el chico
con el que debe realizar un dueto.