En El Alto Palancia. Benafer se localiza en el sector central de la comarca, en el camino que comunica el valle del río Palancia, a la altura de Jérica y el acceso al Sistema Ibérico por el contacto entre las sierras Espina y Espadán, en las cercanías de Caudiel. Es una zona de pequeñas y suaves colinas seccionadas por barrancos y ramblas.  

CAVANILLES, A. J. (1797): Observaciones sobre la historia natural, geografía, agricultura, población y frutos del Reyno de Valencia

“En Benafér hay 100 vecinos, todos labradores, cuyos campos les producen 760 cahíces de trigo, 284 de maiz, apenas 50 entre cebada y judías, 6 cántaros de vino, y como 60 libras de seda”…” A l nordeste de Vibér se hallan tres lugares, Benafer á tres quartos de hora, Caudiél á una, y algo mas apartado Novaliches”…” entra por la izquierda del rio la rambla de Pilares, que tiene su origen en la Fuensanta, situada en lo mas septentrional del término de Vibér: precipítame desde allí sus aguas hacia las huertas de Caudiél, que fertilizan, y pasan después por las de Benafér y Xérica”.

Benafer es un municipio de reducidas dimensiones tanto en superficie como en población, situado en el sector central de la comarca del Alto Palancia. Su término se extiende sobre una superficie de 27 kilómetros cuadrados, con una densidad de población muy baja, de 10,16 habitantes por km2. Dista de Segorbe, capital de la comarca, 15 kilómetros y está equidistante de las tres capitales de las provincias circundantes de Castellón, Valencia y Teruel, alrededor de unos 75 km. Los municipios vecinos son Pina de Montalgrao (norte), Caudiel (nordeste), Jérica (sur) y Viver (noroeste).

Su posición intermedia, entre río y montaña, da lugar a una topografía ondulada que gradualmente asciende desde la cota de 595 metros sobre el nivel del mar donde se encuentra el núcleo de población al sur del término, hasta los 1.200 msnm del cerro de la Cerdaña, en el sector septentrional del municipio.

Iglesia Parroquial del Salvador de Benafer Foto Estepa

Se halla en una localización estratégica entre las abruptas poblaciones del norte y del noreste de la comarca y el corredor natural del río Palancia. Desde Benafer se accede, en dirección a Caudiel, hacia las sierras de Espina, de los Tajos y a la continuidad de éstas en la sierra de Espadán, también al corredor del río Montán, afluente del Mijares. Si nos dirigimos hacia Jérica, se alcanza la principal vía histórica de comunicación entre las tierras de Aragón y la Comunidad Valenciana, por el corredor natural del río Palancia. Parte del término municipal es atravesado por la antigua vía del mineral de Ojos Negros, convertida en la actualidad Vía Verde, la más larga de España.

Un poblamiento dilatado, consolidado en época musulmana

La presencia del ser humano en Benafer es larga y dilatada en el tiempo. Los primeros vestigios encontrados fiables se remontan a las culturas prehistóricas, sobre todo las de época de los Iberos, pues se han encontrado restos en las cercanías de la Partida de San Roque, así como en la Partida Castillejo.

Fuente de la Plaza Nueva L-EMV

Sin embargo, la organización social y poblacional, tal como la apreciamos en la actualidad, es debido a la colonización musulmana, y la posterior reconquista. El primer asentamiento sería de entidad menor, un agrupamiento de personas y casas en una alquería. La conquista cristiana a finales del siglo XIII por Jaime I, significa un cambio radical en términos culturales y sociales. Es en 1379 cuando el Obispo de Segorbe, Iñigo de Valterra compró las tierras para cederlas a 20 repobladores cristianos. La alquería de Benafer estuvo adscrita a la Baronía de Jérica.

Plano de Benafer, en el Alto Palancia. L-EMV

Un lugar con despoblamiento constante

Aunque en los últimos años se ha producido un ligero aumento de población, la tendencia desde 1900 ha sido una constante y prácticamente incesante sangría en los activos demográficos. En 1900, la población de Benafer contaba con 442 personas. Cincuenta años después, el número de habitantes desciende a 297, una merma del 33%. Entre 1950 y 1960 se contabilizan 38 vecinos menos, en 1960 la población de Benafer es de 259 personas. Mientras que, en la década siguiente, en 1970 el descenso en números absolutos y relativos todavía es mayor, pues descendió a 172.

El proceso ha continuado de manera continua desde 1970 hasta los años de máxima despoblación, en 1990, cuando se llega al mínimo de 125 habitantes. A partir de esa fecha, Benafer se mantiene en un número reducido de habitantes, aunque la tendencia es un cierto crecimiento, si bien no es significativo. Entre 1990 y 2022, cuando se alcanzan los 171 vecinos, la demografía de la población tiene una tasa de crecimiento anual de 1,43 habitante por año.

Lavadero municipal de Benafer FotoEstepa

Debe considerarse que Benafer ha experimentado una evolución regresiva de la población. Las tendencias observadas desde 1900 muestran un municipio con pérdidas considerables. La pérdida en los últimos 120 años de más del 60% de los habitantes que se contabilizaban en 1900, significa, además del impacto territorial al carecer de recursos humanos, un ejemplo de despoblamiento. En consecuencia, hay que considerar las características de los residentes actuales definidos por un envejecimiento mayoritario de sus ciudadanos y la falta de relevo vegetativo por la escasa o nula tasa de natalidad.

El paisaje: Un pueblo eminentemente rural

Benafer posee un núcleo urbano cuyo trazado tiene una marcada influencia musulmana, con calles estrechas y sinuosas que circundan el pequeño cerro sobre el que se asienta. En él, además de elementos propios del paisaje urbano como el ayuntamiento, la iglesia de El Salvador, las antiguas escuelas y los lavaderos, se encuentran también huellas de un pasado agrícola en el tejido urbano como las antiguas eras y sus pajares.

El paisaje agrícola está formado por un contrastado mosaico de bancales donde los muros de piedra seca es un elemento distintivo. El espacio agrícola es homogéneo y predominante en el tercio sur del término, hasta el manantial de la Fuensanta. Hacia el norte, cuando el terreno se hace más abrupto, encontramos un paisaje natural construido sobre rocas calcáreas en el que se intercalan masas boscosas con zonas de matorral.

Ermita de San Roque Foto Estepa

Los cultivos dominantes son los olivos que producen un aceite de gran calidad y los almendros, ambos en secano. La existencia de manantiales con abundante agua, como la Fuensanta, El Tercio, la Fandagueda, la Fuensantilla, Sanjuana y la Fuente de los Nogales, han facilitado un paisaje tradicional de regadío de gran belleza y singularidad. En la actualidad, parte de los huertos todavía cultivados se encuentran circundando la población, lo que realza la autenticidad rural del pueblo, presentando un mosaico variado de cultivos entre los que destacan las hortalizas y los campos de cerezos.

Detalle de Benafer Foto Estepa

Puesta en valor del territorio de Benafer. Rutas singulares en su término municipal

Benafer se ha esforzado por divulgar sus valores y sus recursos patrimoniales, naturales y culturales. Para ello se cuenta con varias rutas de senderismo, lo que facilita su utilización con una sección en su página WEB (https://benafer.es/es/rutas):

  • Ruta Fuente de los Nogales. La Fuente de los Nogales es un espacio paisajístico singular de Benafer. El paraje tiene una fuente y está en una barrancada cubierta de frondosos árboles con permanente frescura y sombras. La ruta es de trazado lineal, de un kilómetro de longitud y dificultad fácil.
  • Ruta Ermita de San Roque. Ruta que llega hasta la ermita de San Roque, elemento patrimonial singular de Benafer. Desde ella se puede disfrutar de una excelente vista panorámica. Tiene un trazado lineal, de algo menos de un kilómetro y dificultad fácil.
  • Ruta Viaducto de la Fuensanta. La Fuensanta es un hito paisajístico del municipio. Aunque la ruta propone la visita del viaducto de la vía verde de Ojos Negros, junto al que también se encuentra el de la actual vía a Teruel, también se accede al manantial homónimo que es el inicio de un sistema de regadío de gran singularidad. Su recorrido tiene un trazado circular de dificultad fácil y de 7,7 kilómetros de longitud.
  • Ruta en Benafer por los Restos de la Guerra Civil. La ruta propone el conocimiento de la presencia de la Guerra Civil en Benafer. Para ello se visitan dos elementos singulares cercanos a la población: un nido de ametralladoras y un búnker. La ruta tiene un trazado lineal de unos 3 kilómetros y de fácil ejecución.
  • Ruta Yacimiento Ibero. Ruta que tiene como destino el yacimiento ibero de los Castillejos. De trazado lineal tiene una longitud aproximada de 2 kilómetros, de dificultad fácil.