Noche tras noche cientos de miles de personas se sientan frente al televisor para disfrutar de uno de los programas más anecdóticos de la parrilla: First Dates. El formato de Cuatro reúne a sus invitados, que buscan el amor en una romántica velada, que bien puede ir sobre ruedas, pero que también en muchas ocasiones acaba siendo un verdadero desastre. 

Los espectadores de First Dates están acostumbrados a conocer a través del programa a personajes de lo más pintorescos. A menudo los carácteres de quienes se sientan en la misma mesa para disfrutar de la cita a son demasiado incompatibles. Por otra parte, otra situación que suele darse es que la tensión sexual entre ambos se palpa incluso a través de la pantalla. Sea como sea, siempre se acaban generando situaciones de lo más surrealistas en el plató 'del amor'

Jesús y Kelly también han llegado al programa en busca de su media naranja. Él viene desde Galicia y se dedica a jardinería, y tiene caballos y ganado, unas sesenta vacas aproximadamente: "Soy el único chico joven de mi aldea", asegura. Ha revelado que le gustan las mujeres latinas porque "son más dulces y cariñosas, no son amargas".

Jesús:"Puro fuego, candela... Me derrito"

Ha tenido suerte, y es que su cita, Kelly, es de Brasil. Cuando le ha visto aparecer se ha quedado boquiabierto: "Me ha encantado, no esperana que fuera tan guapa". En el momento en el que ella le ha revelado su nacionalidad, todavía le ha gustado más: "Uf, madre mía, puro fuero, candela... Me derrito", ha expresado.

El joven ha dejado boquiabierto a Carlos Sobera cuando ha revelado que ha llegado al plató de First Dates no en avión, ni en tren, ni siquiera en autobús o coche. Jesús ha asegurado que ha venido desde Galicia andando. Además, ha dicho que no es la primera vez que recorre grandes distancias a pie. Ha contado que una vez viajó a Barcelona para una entrevista de trabajo y que, además de timarle, tuvo que volver andando a Galicia por no tener suficiente dinero para el transporte. Tardó seis días.

Kelly y Jesús en First Dates. Cuatro

El baile que sube la temperatura a Jesús

Durante la velada el joven no ha parado de elogiar a la brasileña, y en un momento determinado le ha levantado del suelo. Algo que, sin duda, no ha sido buena idea. Kelly ha lamentado que es algo que odia. No obstante, para quitarle hierro al asunto, ha decidido seguir el rollo al gallego y aceptar el baile al que le había invitado. El baile ha hecho que a Jesús le suba la temperatura, y mucho.

Los dos se han definido como personas "calientes". Esto era lo que le faltaba a Jesús para lanzarse a la piscina sin pensarlo dos veces, dándole un beso lleno de pasión a Kelly. Después de esto incluso se han hecho un selfie juntos. La cena, en cambio, la han pagado a medias. Cuando ha llegado el momento de la cita final, ella le ha dejado claro que no le ha gustado nada que le cogiera y levantara del suelo. Sin embargo, ambos han compartido que quieren seguir conociéndose, y Jesús se ha comprometido a enseñarle Galicia.