Iniciado en Mactán (Filipinas) en diciembre de 2017, el proyecto pionero de monitorización continua de los gases de efecto invernadero en la superficie de los océanos «The Winds of Change», que se lleva a cabo a bordo del velero «Fleur de Passion», en colaboración con la Universidad de Ginebra, en el marco de The Ocean Mapping Expedition, ha permitido recoger en tiempo real y de modo continuo datos de referencia esenciales acerca de las concentraciones de metano y dióxido de carbono a lo largo de toda la ruta del barco hasta Singapur, en donde hace escala desde el 13 hasta el 25 de marzo, procedente de Brunei y de Kuching.

El programa «The Winds of Change» ha permitido asimismo identificar los primeros puntos críticos de estas zonas de fuerte emisión de gases de efecto invernadero cuya dinámica requiere una vigilancia especial por parte de la comunidad científica.

El programa tiene como objetivo aportar a la comunidad científica datos de campo inéditos que contribuyan a una mejor comprensión del papel de los océanos en el problema del calentamiento global.

Los científicos de la expedición alertan de que, a la vista de la preocupante evolución del clima y de la acidificación de los océanos que se deriva de ello, deben revisarse de manera urgente los conceptos sobre el ciclo del carbono a escala global. «Las concentraciones de metano y de dióxido de carbono experimentan claros aumentos en la proximidad de las ciudades, cerca de las islas y en la superficie de las aguas poco profundas o, dicho de otro modo, en las zonas con impacto de la actividad humana y donde se observa una mayor proliferación de alga», explica el profesor Daniel McGinnis, jefe del Grupo de Física Acuática de la Universidad de Ginebra y responsable del proyecto.