Ya ha pasado un mes y medio desde que el Gobierno decretase el estado de alarma debido a la actual crisis sanitaria causada por el coronavirus. En esta situación tan excepcional que nos ha tocado vivir, nuestros primeros pensamientos son para las víctimas de esta tragedia y sus familias, a quienes queremos trasladar todo nuestro apoyo. También para aquellos que han padecido la enfermedad o están luchando ahora mismo por salir de ella. Y, por supuesto, nuestro reconocimiento para el personal sanitario, que son los verdaderos héroes de esta realidad. Y, también, a las Fuerzas Armadas, a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, y a todos los profesionales de distintos colectivos, (como nuestros profesionales de la red que están atendiendo en las oficinas a los clientes), farmacéuticos, transportistas, voluntarios€ Precisamente, una de las mayores enseñanzas que nos deja esta situación es la ola de solidaridad que recorre nuestro país, una vez más, en los tiempos difíciles.
En Banco Santander desde el primer momento quisimos estar al lado de nuestros empleados, clientes, accionistas y la sociedad en general, con el fin de mitigar los efectos que esta pandemia pudiera causar. Por eso, fuimos una de las primeras empresas en mandar a nuestros empleados de los servicios centrales y centros corporativos a teletrabajar; hoy el 86% de nuestros empleados en el caso de la Comunidad Valenciana pueden teletrabajar. Además, y con la máxima prioridad de proteger la salud de nuestros empleados y clientes, hemos ido adaptando el número de sucursales abiertas en los distintos mercados garantizando en todo momento los servicios, gracias a las herramientas digitales y reforzando otros canales de relación con los clientes. Desde que comenzó el confinamiento, los accesos por canales digitales han experimentado un fuerte crecimiento que supera ampliamente el 200% en el caso de la app móvil y la web. Asimismo, el banco se ha comprometido a mantener los 29.000 puestos de trabajo directos que tiene en España y a ayudar a los proveedores con más dependencia de la entidad en nuestro país.
También, el pasado mes de marzo, anunciamos la creación de un fondo solidario por importe mínimo de 25 millones de euros, financiado con el recorte de la retribución de la alta dirección y aportaciones voluntarias de los empleados. Todos estos fondos se están destinando a atender las necesidades de hospitales y personal sanitario, y a apoyar a distintas organizaciones y fundaciones que desempeñan un papel relevante en la lucha contra el coronavirus. Además, el banco está poniendo al servicio de las autoridades sanitarias, también en el caso de la Generalitat Valenciana, su red internacional y su capacidad de relación con proveedores y distribuidores, y garantizar que el material sanitario llega donde más se necesita.
Estamos atendiendo la demanda de liquidez por parte de las empresas, pymes y autónomos ofreciendo distintas alternativas, entre ellas las líneas ICO, y hemos puesto en marcha un plan de ayudas en distintos ámbitos, como es el caso de opciones complementarias para aquellos clientes que tengan problemas para hacer frente al pago de sus hipotecas y no cumplan los requisitos del Real Decreto para acogerse a la moratoria hipotecaria anunciada por el Gobierno. El banco ha otorgado, también, moratoria en el pago del alquiler a todos los inquilinos que lo soliciten de viviendas propiedad de la Entidad.
Con la vista puesta en la protección de uno de los colectivos más vulnerables, los mayores de 65 años, hemos adaptado nuestra oferta de productos y servicios para hacer más llevaderas las medidas de confinamiento para este colectivo y proteger su bienestar. Así, ofrecemos una carencia de tres meses en el pago del paquete básico de nuestro Plan Senior, que incluye entre otros, equipo de tele-asistencia así como distintos servicio de apoyo y un seguro garantía para accidentes.
Pensando en la salud de nuestros clientes y con el fin de contribuir a minimizar los desplazamientos, mientras dure el estado de alarma, la entidad no cobrará comisión por la retirada de efectivo con tarjeta de débito en los cajeros automáticos de otras entidades. Estrenamos, además, un proceso pionero en el sector y en España para que el cliente pueda retirar hasta 300 euros del cajero automático sin necesidad de tocar el teclado, a través de un código QR.
Estas medidas son algunos de los ejemplos que ilustran los diferentes ámbitos en los que estamos trabajando y seguiremos en esta línea, escuchando las necesidades de nuestros clientes y empleados, intentando dar respuesta a sus problemas y necesidades. Somos conscientes de que la vuelta a esa nueva normalidad no va a ser fácil; pero, como decía el pianista y compositor Duke Ellington, los problemas son oportunidades para demostrar lo que se sabe. Nosotros, en Santander, queremos ser parte de la solución a esos problemas.
