La era digital va dejando en un segundo plano al papel y en el mundo de la educación eso significa decir adiós a los libros de texto y empezar a utilizar nuevos formatos como las tabletas digitales. En el colegio la Milagrosa de Cullera han hecho este cambio en 4º de Primaria, pero la idea es extenderlo poco a poco a la mayor parte de los cursos.
El proyecto se denomina «iPad, one to one». El equipo docente explica que no sólo se trata de cambiar libros de texto por libros digitales, sino que «se cambia al iPad para cambiar la metodología de trabajo» y que ésta sea más activa, que los alumnos trabajen por grupos, participen más en el desarrollo de la clase y aprendan cosas prácticas para su futuro. En definitiva, se trata de dejar también en un segundo plano las clases magistrales.
Así, por ejemplo, los profesores graban en video algunas explicaciones teóricas y la incorporan a los libros digitales que han elaborado ellos mismos. «No perdemos tiempo con la clase magistral», cuentan. Cuando el alumno tiene que hacer sus deberes en casa, si tiene alguna duda puede consultar el video.
Aunque, también puntualizan que algunas explicaciones más complicadas sí que se siguen dando en clase.
«Gamificación»
Las tabletas también pretenden incorporar infinidad de juegos educativos, ya que otra metodología que utilizan en este centro es la «gamificación», es decir, usar técnicas propias de los juegos para enseñar. Asimismo promueven el aprendizaje cooperativo, el aprendizaje con compromiso social y el aprendizaje visual para que los niños se enseñen a pensar por ellos mismos.
Todo el trabajo se organiza a través de unidades didácticas integradas para poder adquirir competencias necesarias para la vida diaria. Por ejemplo, una unidad puede consistir en elaborar una receta de cocina, con lo que se trabajan contenidos de las asignaturas de Conocimiento del Medio (la pirámide alimentaria) y de Valenciano, lengua y literatura.
Este proyecto se inició al empezar el curso escolar y, tras más de seis meses de bagaje, desde la Milagrosa aseguran que los alumnos y los padres están satisfechos con los resultados. Las tabletas no han supuesto un incremento en el gasto económico familiar ya que sustituyen al desembolso de los libros de texto. Además, tampoco se ha abandonado el papel por completo porque los estudiantes siguen utilizando libretas y en clase hay algunos libros de texto que se pueden consultar.
Esta iniciativa se extenderá el próximo curso a los alumnos de 5º de Primaria y 2º de la ESO, de forma que en unos años se pretende que lo utilicen los alumnos desde 4º de Primaria a 4º de Secundaria.
