El paso de Ismael Corell por la alcaldía de Turís puede ser tan breve como su pertenencia al partido que le dio cobijo para concurrir a las elecciones. La dirección de Ciudadanos anunció ayer la apertura de un expediente sancionador a Corell al considerar que el pacto que ha alcanzado con el PSOE y Compromís se salta varias «líneas rojas» y fuentes del partido no dudaron en señalar que «lo más probable» es que el expediente concluya con la expulsión. Corell es el único concejal de la formación de Albert Rivera en Turís y el sábado se alzó con el bastón de mando gracias a un acuerdo de última hora con PSOE y Compromís, que prevé que ostente la alcaldía durante seis meses.
La dirección de Ciudadanos afea al actual alcalde de Turís su pacto con Compromís, cuando el partido rechaza de plano los acuerdos con formaciones nacionalistas, pero sobre todo que haya negociado cargos y haya alcanzado un pacto de gobierno a cambio de la alcaldía. «No es coherente que siendo un único concejal se convierta en alcalde por seis meses», indicaron fuentes de Ciudadanos, mientras señalaban que no es la forma de hacer política que defiende la formación de Albert Rivera. «No es la imagen ni el objetivo del partido», incidieron las mismas fuentes, mientras señalaban que esas prácticas forman parte de la «vieja política (?) Nosotros hemos venido a hacer otra cosa». Ciudadanos reclamará el escaño a Ismael Corell.
Un portavoz de Ciudadanos recordó ayer que las directrices del partido iban encaminadas a que los ediles no participaran en gobiernos que no lideraran y señalaron que Corell no había comunicado su acuerdo con PSOE y Compromís. El partido ya ha expulsado a varios concejales por llegar a acuerdos con Compromís en otros municipios.
El resultado electoral del 24M en Turís dio a Ciudadanos, con un único concejal, la llave de la gobernabilidad. El PP fue el partido más votado, aunque igualaba a seis concejales con PSOE y Compromís. Aunque al principio se daba por hecho que Ismael Corell se alinearía con la izquierda, negoció a dos bandas hasta prácticamente el último día. De hecho, no cerró un acuerdo con PSOE y Compromís hasta la víspera del pleno de investidura por la noche. El acuerdo contemplaba que ostentaría la alcaldía durante seis meses para, en enero, entregarla al PSOE como grupo mayoritario. Desde la dirección del partido en Valencia dieron por casi segura su expulsión.
