La Associació Salvem l'Horta de Guadassuar-Agrocultura, que reúne a propietarios de terrenos aledaños y a ecologistas, considera que la construcción del macrocircuito de karts en Guadassuar está repleta de irregularidades. Los riesgos medioambientales que encierra el proyecto son el eje conductor de las alegaciones presentadas por el colectivo contra la construcción del complejo deportivo.
Salvem l'Horta acusa a la empresa promotora del circuito de hacer «caso omiso a la obligación de retirar los neumáticos que almacenan de forma ilegal e incontrolada en suelo no urbanizable común». Además, explican que la constructora «viene haciendo oídos sordos a la prohibición hecha por el ayuntamiento por decreto de alcaldía del 3 de mayo de 2015 de construcción del circuito por no disponer a fecha de hoy, de todos los permisos necesarios». El promotor ha realizado hasta ahora de movimentos de tierras, preparación de curvas y sedimentación del trazado del circuito.
El grupo de vecinos de Guadassuar considera que el proyecto «atenta contra la sostenibilidad» ya que, por ejemplo, no tiene asegurado el suministro de agua potable y tampoco se sabe cómo actuará con la gestión de residuos. Por tanto, creen que puede tratarse de un grave problema para los acuíferos subterráneos, además de recalcar que «un circuito de karts no es compatible con el medio ambiente».
Del mismo modo, destacan su estupor ante el hecho de que el circuito haya conseguido la Declaración de Interés Comunitario (DIc) por parte de la Secretaría Autonómica de Urbanismo. A este respecto, subrayan que una DIC que se realice en terrenos no urbanizables debe fomentar la sostenibilidad y su acceso mediante medios no motorizados. De igual manera entienden que tampoco debería alterar el paisaje rural ni otras construcciones tradicionales ya existentes.
El colectivo se centra también en otro aspecto que estima relevante: los cambios de discurso que la promotora el Circuit de la Ribera realiza según las circunstancias: «A la Diputación de Valencia le comunicaron que no se realizaría ningún tipo de competición, pero en diferentes medios han dicho lo contrario». Además, destacan que las carreteras colindantes no podrían asumir una afluencia masiva de vehículos al circuito en caso de realizarse las carreras.
Por todos estos motivos, la asociación insta al ayuntamiento a no conceder la licencia medioambiental que ha solicitado la empresa y pide al alcalde de Guadassuar que «deje de hacer declaraciones favorables cuando sabe que este proyecto nunca puede cumplir con la normativa vigente en material ambiental».
