Alzira brinda una retrospectiva póstuma a Enric Solbes

Alzira rinde homenaje a uno de sus artistas más brillantes. A las 20 horas se inaugurará el lunes en la Casa de la Cultura la exposición «Enric Solbes. Antològica. 1980-2009». En ella se recuerda la trayectoria del artista, fundamentalmente la pictórica, mediante una selección de obras que mostrará cronológicamente su evolución artística a través de las distintas series trabajadas por el autor, aunque el catálogo que acompaña la exposición recoge también una buena muestra de sus trabajos de ilustración, diseño gráfico y cartelismo. Solbes nació en Alcoi pero las circunstancias vitales lo llevaron a Alzira, donde residió y desarrolló su trayectoria laboral durante los últimos veinte años de su vida. Los primeros vínculos se remontan cerca de treinta años atrás, a su época de estudiante de Bellas Artes en Valencia, cuando conoció a los pintores Adrià Pina y Vicent Marco, de l'Alcúdia, y al artista alcireño Joan Verdú. Con ellos compartió sus primeras exposiciones y con ellos llegó también a l'Alcúdia, donde completó su formación artística en el taller del, ya entonces, muy reconocido pintor Manuel Boix que, con el tiempo, llegó a ser uno de sus mejores amigos. Otra circunstancia que le arraigaría más si cabe en Alzira sucedió en el año 1986 cuando ilustró el libro de Josep Franco «L'últim roder», iniciando así la larga y fructífera relación con la entonces naciente editorial de Alzira Bromera y con su fundador y gran amigo, Josep Gregori. Con ellos desarrolló su trabajo creativo en el campo de la ilustración y el diseño gráfico durante los últimos años.