Cullera alzó la voz de forma conjunta y comunitaria, para llamar la atención sobre la situación de discriminación que todavía sufren las personas transexuales. La jornada sobre derechos LGTBI, organizada por la concejalía de Igualdad que dirige Francesca Ortiz y el Consell d'Igualtat, abordó esta problemática a través del caso del joven valenciano Hugo Sánchez, un adolescente de 17 años que en el marco del proyecto Intransigentes lleva a cabo una lucha por visibilizar la realidad de un colectivo que todavía sufre el estigma.

El doctor en medicina y cirugía Vicent Bataller, puso la voz crítica. El sexólogo lamentó que la Comunitat Valenciana, tras más de dos décadas de gobiernos de la derecha, esté a la cola de España en promoción de la salud sexual así como en materia de políticas de igualdad, visibilización y eliminación de estigmas y fobias. «A mi consulta ha venido gente transexual con la intención de suicidarse», dijo enmudeciendo al auditorio.

Bataller también dio un toque de atención a los actuales gobernantes: «Llevamos dos años de gobiernos del cambio y hay que dotar estas políticas con recursos económicos también porque eso aún está pendiente».

El doctor especialista en la materia fue más allá y exigió que la escuela contribuya a normalizar la situación. Lo hizo a colación de la intervención de una joven alumna de 14 años que durante el debate afirmó que «jamás he escuchado palabras como transexual o bisexual en el aula».

Desde las aulas

Bataller, que lleva más de 20 años en la lucha por los derechos LGTBI defendió que «enseñar la diversidad sexual en las aulas no es adoctrinar, sino enseñar derechos». Por ello no dudó ni un solo momento en exigir a la Conselleria de Educación que «retire las ayudas públicas a los colegios que no cumplan la ley en esta materia».

Por último, reclamó que la transexualidad se elimine de la lista de patologías de la Organización Mundial de la Salud (OMS) como ya ocurrió en los años 70 del siglo pasado con la homosexualidad.