Aunque la confrontación sigue abierta en los juzgados y en la dialéctica política que separa a conservadores y progresistas, la pugna por demostrar la eficacia del mejor modelo para gestionar la sanidad pública comienza a ofrecer datos que permiten comparar cómo ha funcionado e

Según los datos facilitados por el propio hospital alcireño, la gestión pública ha aumentado el número de intervenciones quirúrgicas realizadas en abril y también las pruebas de radiodiagnóstico, neurofisiología o medicina nuclear. También se han incrementado los pacientes atendidos en urgencias o en las consultas de los especialistas. «Se ha mantenido con normalidad la actividad asistencial durante el primer mes de gestión pública directa», concluyó ayer la nueva gerente, Isabel González.

El Hospital Universitario de La Ribera pasó a ser gestionado directamente por la Conselleria de Sanidad el pasado 1 de abril, tras permanecer 17 años bajo las órdenes de una empresa privada, Ribera Salud, que se adjudicó en 2001 el contrato bajo un nuevo sistema de concesión sanitaria bautizado durante el mandato de Eduardo Zaplana como Modelo Alzira.

Evaluar los cambios

Ribera Salud siempre presumió de una gestión que le valió reconocimientos dentro y fuera del sector sanitario. Antes de expirar el contrato, lanzó negros augurios sobre el futuro del hospital una vez entraran los nuevos gestores del Consell. Pronosticó que se reduciría la cartera de servicios, algo que de momento no se ha producido, y aseguró que muy pronto se incrementarían las listas de espera.

Aunque ha pasado muy poco tiempo para evaluar con rigor los cambios, desde el 1 de abril todavía no se han desmoronado las estadísticas. Más bien al contrario: el Hospital Universitario de La Ribera ha realizado 1.551 intervenciones quirúrgicas, frente a las 1.489 operaciones llevadas a cabo en abril de 2017, lo que ha supuesto un incremento del 4,16%. El 89,9% de las nuevas operaciones han sido programadas, mientras que el 10,1% han sido urgentes, parecidos porcentajes a los que se registraron un año antes.

Durante el mes de abril, se atendieron 9.354 urgencias, un 2,46% más que en el mismo periodo de 2017, lo que ha supuesto una media de 322 urgencias diarias. En cuanto a los ingresos hospitalarios, el hospital alcireño ha registrado en su primer mes de gestión pública 1.806 altas, un 3,26% más que en 2017.

A la vista de esos datos, la nueva gerente interpreta que el proceso de reversión del Hospital de La Ribera y su departamento de salud «se ha realizado con previsión y planificación desde la Administración valenciana, lo que demuestra la profesionalidad y el esfuerzo de todos sus trabajadores».