Nuevo suceso que demuestra la precaria situación que se vive en el campo valenciano, con especial incidencia en la comarca ribereña. La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de València ha condenado a nueve meses de prisión a un vecino de Torrent, acusado de estafar a un agricultor de Corbera a quién engañó comprándole las naranjas con el objeto de lograr hacerlas suyas sin abonar posteriormente el precio acordado. La sentencia judicial avala las tesis de las acusaciones defendidas por el despacho de Abogados Pérez Vercher.
El acusado utilizó el contrato como una ficción en su estrategia premeditada, lo que ya había ensayado antes en otras poblaciones valencianas en las que, según los informes de la Guardia Civil de Paiporta, a través del Equipo Roca y aportados a las actuaciones, en 2016 habían sido encontradas varias denuncias formuladas por 46 personas de Picassent y su partido judicial, cuyos importes impagados ascendían a alrededor de 420.000 euros.
La recolección fue llevada a cabo por una empresa distinta, lo que levantó las sospechas del denunciante. El acusado extendió una Letra de Cambio a sabiendas que en su cuenta corriente, según el mismo reconoció en el acto del juicio, «no sabía si tenía dinero para pagar o no», como medio para acallar a la parte vendedora y mantenerla sumida en la engañosa esperanza de cobrar el precio debido. La cuenta bancaria continuó en situación negativa durante todos los meses consecutivos.
«Absoluta desprotección»
Para llegar hasta el agricultor de Corbera, el estafador pidió a un vecino de la misma localidad «que le buscase naranjas», según la propia declaración del acusado. La utilización de una persona de contacto conocida por la vendedora y su esposo, que les presentó al acusado con el convencimiento que se trataba de un comprador «solvente y serio», según declaró el acompañador.
Según el abogado José Antonio Pérez Vercher, director del despacho que ha ostentado la acusación particular, «la situación de los agricultores en el momento de la compraventa de sus cosechas es de absoluta desprotección, la misma que se arrastra desde hace años en el campo valenciano, por lo que el agricultor sólo busca seguridad en el cobro aunque tenga que desprenderse de su cosecha a un precio muy bajo». En las localidades de la Ribera se han registrado otras estafas laborales, además de continuos robos.
Sentencia
El acusado ha sido condenado en Sentencia a la pena de 9 meses de prisión, inhabilitación para ejercer el derecho de sufragio pasivo durante el mismo tiempo, y el pago de las costas procesales.
Al mismo tiempo deberá abonar en concepto de responsabilidad civil la cantidad de 5.803 euros, más los intereses.
