La alcaldesa de Sueca, Raquel Tamarit, destituyó el miércoles al edil Pau Roselló tras haber solicitado el PP expedientes correspondientes a la gestión de este concejal, entre ellos el del polémico festival Rock on the Road, celebrado el pasado fin de semana. Los populares aseguran que el cese se precipitó al conocer la primera autoridad local las intenciones de la oposición «con el claro propósito de eludir su responsabilidad, puesto que se había destinado dinero público a ese evento parece ser que con los informes de Intervención, Tesorería y Secretaría en contra».
Pleno extraordinario
El portavoz del PP, José Luis Ribera, anunció ayer que si se confirman sus sospechas es partidario de elevar los hechos a la Fiscalía para que se determine si pudiera ser constitutivo de delito. De la misma manera, va a solicitar la convocatoria de un pleno extraordinafrio para que Tamarit «dé explicaciones claras y entendibles»
Ribera también asegura que las relaciones entre el gobierno local se han deteriorado mucho: «Hace tiempo que detectamos la falta de sintonía entre la alcaldesa y prácticamente todos los concejales de Compromis y GISPM». En esas condiciones, lamenta el PP, «cada concejal funciona de forma autónoma».
Los populares ya tenían a Roselló en su punto de mira. Le habían acusado de «incompetente». El PP subraya que este edil «se estrenó con una Cabalgata de Reyes sin Reyes», y desde ese mismo momento los «despropósitos» han sido continuos: «desde un recinto prefabricado para conciertos mal ubicado (y que por no retirarse a tiempo acabó malográndose) hasta contrataciones para fiestas a precios muy superiores a los habituales para los mismos eventos en otras poblaciones». Ribera añade: «Roselló ha hecho un uso casi personal del Consell de la Juventut, un lugar que se ha convertido en sede de encuentros con sus amistades».
Situación «generalizable»
Sin embargo,el PP sostiene que «el descontrol» no afecta solo a Roselló. «Los desencuentros entre la alcaldesa y la concejal de Medio Ambiente han sido notorios y patentes en relación a la limpieza y recogida de basura en la localidad y en cuanto a la adjudicación del nuevo contrato». Los populares también destacan la mala relación del concejal de Deportes con alguna asociación deportiva y las dificultades de Pilar Moncho para compatibilizar sus dos ocupaciones: «Sigue más preocupada por sus labores como diputada de Turismo que por las del ayuntamiento, habiendo tenido que recurrir a constantes privatizaciones de servicios públicos como el de Salvamento o contratos en la residencia».
