El Partido Popular de Cullera acusó en la última sesión plenaria al concejal de Playas, Salvador Tortajada, de no atender la queja de una usuaria de la zona accesible de la Playa de San Antonio. Ésta vino motivada, según explicaron los propios populares «por la presencia, como un trabajador de la empresa más, de un hombre de edad, presumiblemente ya jubilado que realizaba los servicios propios de los monitores, incluso en determinadas ocasiones más que los propios monitores, sin formación de ninguna clase».

La formación conservadora acusó a Tortajada de «falta de tacto» a la hora de atender la queja de la usuaria de la playa accesible. Además de cuestionar la formación de dicho hombre, los populares criticaron sus formas: «Lo más preocupante, es que realizaba dichos servicios con insultos y malos tratos, llegando en ocasiones, como ha manifestado la propia usuaria, a amenazarlos». Según su versión, la afectada habría realizado una denuncia por escrito al ayuntamiento que jamás se respondió.

El concejal Tortajada, por su parte, aseguró no tener constancia «de ninguna denuncia, al menos no como tal». Sí que reconoció, no obstante, que la persona implicada se dirigió a él en persona para contarle su problema, por lo que la atendió «in situ» y se comprometió a hablar con la empresa para buscar soluciones. Asimismo, explicó que la persona en cuestión «es un voluntario que ayuda, solidariamente, a aquellas personas que no tienen familiares para poder acceder al mar». Además, el edil le restó importancia al tema, «ha sido la única 'queja' recibida en ese aspecto y son más de miles los usuarios que a lo largo del verano disfrutan de las zonas de playa accesible en Cullera», comentó al respecto.