Su proclamación como fallera mayor de Alzira la semana pasada en un pleno solemne empieza a acelerar la vida de Mercedes Bohigues hacia una velocidad de vértigo. Mer fue ayer la encargada de imponer, una a una, las bandas que lucirán durante el presente ejercicio las integrantes de su corte de honor y las falleras mayores de las 35 comisiones de Alzira en un acto de exaltación que destacó por las reivindicaciones en favor de la igualdad en la fiesta. La mantenedora, Miriam Boluda, fallera mayor de Alzira de 2010, lanzó el primer mensaje en este sentido para señalar que, frente a los tópicos sobre la «mujer florero», «ha llegado el momento de decir lo contrario, que las fallas son un entorno de igualdad y de respeto a la mujer». El alcalde, Diego Gómez, cogió el guante para lanzar un mensaje similar: «El mito de la mujer florero con peineta y mantilla se ha acabado».

El Gran Teatro vistió sus mejores galas para acoger el acto de exaltación de Mercedes Bohigues, que tuvo uno de sus momentos álgidos con la entrada de la fallera mayor de València, Marina Civera. También acudieron a rendir pleitesía a la reina fallera de Alzira las juntas locales de Algemesí, Carcaixent, Elda, Denia, Gandia, Sueca, la reina de Segorbe, la fiesta de la Vendimia de Jumilla y la Federació de Fogueres de Sant Vicent del Raspeig, además de una quincena de cofradías y entidades festivas y culturales de la ciudad.

Mercedes Bohigues tuvo palabras de agradecimiento para todos los que le acompañaban en una noche «tan mágica y especial», en la que dedicó un especial recuerdo a sus familiares, entre ellos su padre, el presidente de la Junta Local Fallera, Jaume Bohigues: «Como hija intentaré estar siempre a tu lado y como fallera mayor de Alzira mantener el compromiso y las obligaciones que comporta ser quien lleva el estandarte principal de la fiesta fallera». Por otra parte, tras recordar que este año se conmemora el 75 aniversario de la JLF, felicitó a todos los falleros que han trabajado en la entidad o de forma anónima en sus comisiones y que han contribuido a convertir a Alzira en la segunda potencia fallera y a que la fiesta haya podido obtener la declaración de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

Jaume Bohigues recordó tanto a Mer como a las 35 falleras mayores que anoche se iniciaba «un tiempo mágico, un año especialmente emotivo y, tras recordar el paso de Mercedes por la corte de honor de 2010, comentó: «Los sueños se cumplen cuando mantienes el compromiso en ellos».

El alcalde de Alzira reivindicó en su intervención la igualdad de géneros en la fiesta -«las mujeres no pueden dar ningún paso atrás», comentó- y apeló a la responsabilidad de las comisiones para que ésta se celebre con respeto a todos los ciudadanos. «El mito de la mujer florero con peineta y mantilla se ha acabado. Las cosas han cambiado, pero deberemos saber si las mujeres falleras son flores de verdad o si quieren ser las propietarias de la floristería. La igualdad en la falla es una labor de cada día (...) hemos de llegar a hacer visible y real que la tienda de flores la gestionan igual las falleras que los falleros», comentó.