Los vecinos de Llombai pagarán el próximo año 22 euros menos por la tasa de recogida de residuos sólidos urbanos. El gobierno municipal aprobó en un pleno extraordinario celebrado el jueves la nueva tarifa de 42 euros por vivienda o familia frente a los 64 del año anterior, mientras que a los establecimientos comerciales se aplicará una rebaja similar del 34 %.
La reducción de la tasa es consecuencia directa del nuevo contrato gestionado por la Mancomunitat del Marquesat para la recogida de la basura, que entró en vigor en junio, y que contempla más servicios que el anterior por un precio inferior.
«Esta rebaja de la tasa llega acompañada de una mejora del servicio porque ahora la recogida es diaria y, además, se introducen mejoras como la recogida de poda semanal, que antes no existía y la prestaba el ayuntamiento con personal propio, o la recogida de voluminosos, que antes era mensual y ahora también se realizará cada semana», comentaron al unísono el alcalde de Llombai, Anselmo Cardona, y el edil independiente que ejerce a la vez como presidente de la Mancomunitat del Marquesat, Josep Forés. El grupo popular se abstuvo en el pleno argumentando que había recibido la propuesta sin apenas tiempo para estudiarla.
Cabe recordar que, además de la rebaja de esta tasa municipal, los vecinos de Llombai también verán reducirse el próximo año la tasa por el tratamiento de la basura, un gravamen que fija al Consorcio de Residuos Ribera-Valldigna en base al volumen de basura generada y que, según el importe que de forma provisional recoge la ordenanza aprobada por la entidad, pasará de 73,73 euros a 68,81.
El nuevo contrato del servicio de basura mancomunado del Marquesat supone un ahorro de 19.000 euros respecto del que a finales de 2016 adjudicó la Mancomunitat de la Ribera Alta, en lo que representaba una solución transitoria hasta la implantación de un servicio mancomunado más amplio que no ha prosperado, y de 70.000 euros respecto de lo que facturó en 2015 la empresa que realizaba el trabajo a través de una encomienda de servicio que se arrastraba desde mediados de los años noventa. El nuevo contrato regulariza esta situación y conlleva además un ahorro.
Josep Forés detalló que el importe anual del contrato es de 141.574 euros y que, en el reparto entre las tres localidaes del Marquesat, a Llombai le corresponde aportar un 39,14 %, lo que se traduce en 55.412 euros.
La repercusión de la baja del contrato en los recibos de los vecinos se traducirá en un ahorro de 22 euros por familia, incidió el alcalde, mientras señalaba que la reducción aplicada es prácticamente proporcional a la rebaja de costes. Junto a la ampliación de los servicios, el contrato también contemplaba la renovación de contenedores de basura tanto en el casco urbano como en las urbanizaciones.
