Impresionante exhibición de rugby la que se pudo ver en el campo Juan Palomares Corella de Cullera con la victoria de los locales por 83-5 ante la Universitat d'Alacant. Un marcador histórico. Los ribereños demostraron por que son líderes de la categoría -a ocho puntos de distancia de su inmediato perseguidor- con un juego firme, decidido y demoledor, con un partido completo frente en una Universitat d'Alacant débil pero valiente.

La primera parte fue un duelo de los locales contra los locales, como si solo existiese un solo equipo en el campo. Lo que no significa que los estudiantes alicantinos se rindiesen o bajaran los brazos, más bien al contrario. El 41-0 de los primeros cuarenta minutos así lo testimonian. El rival, además de los momentos de poner en juego el balón después de que los de la Ribera marcaban, solo atravesó la línea del centro del campo en dos ocasiones y solo pisaron la zona de veinte y dos en una. La defensa de los ribereños también estuvo contundente.

Los delanteros ofrecieron un juego en abierto excelente, con velocidad, contundencia y decisión pero también muy técnico con pases cortos, rápidos y precisos, deshaciendo la resistencia del rival en todo momento. En el juego cerrado su presión resultó extenuante con el fruto de ganar la inmensa mayoría de los balones. Otra cuestión muy diferente fueron las «touches». Mientras las propias se ganaron con autoridad, se consiguió en contadas ocasiones hurtar las de los alicantinos, mérito que se tiene que apuntar al rival y no a errores de los locales.

También los dos medios jugaron de manera espléndida. Uno, el de «melée», coordinó perfectamente su delantera y sirvió muchos buenos balones al de apertura, que igualmente estuvo más que brillante, tanto escogiendo las jugadas como dirigiendo la línea y perforando la defensa de los visitantes. Los dos centros, magníficos, profundizando continuamente para llevar el balón a la línea de marca adversaria y efectuando pases precisos y efectivos con un porcentaje de errores prácticamente nulo. Los alas brillaron tanto en apoyo como en efectividad y combinación con los centros. Por último el «arrier» se encargó de forma magnífica de recoger los balones que enviaban los universitarios para intentar huir desesperadamente del acoso de los local, montando contraataques rápidos, inteligentes y efectivos.

Intratables

El anterior panorama se repitió a la segunda mitad, con la diferencia que entre el minuto 60 y el 70, más o menos, los locales bajaron el ritmo y los alicantinos aprovecharon para hacer la marca que los evitó volver a casa con un cero a su favor. Los ensayos locales fueron obra de Víctor Sieres, Juan Matei por tres veces, Vicent, Andrés, Joselu, Sancasto, Valiente, Gomis, Pane y Víctor Monserrat. Destacar además de este último el elevado nivel de transformaciones a palos, materializando hasta ocho de ellas.

La competición volverá ya en enero con la visita al Dénia.