La estructura de hormigón del frustrado centro comercial Vilella forma parte desde hace más de una década del paisaje urbano de Alzira, aunque el ayuntamiento no parece dispuesto a permitir que su presencia se eternice. El requerimiento aprobado esta semana por la junta de gobierno para exigir a la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) que, como titular del inmueble y la parcela, garantice la seguridad tras haber detectado la presencia de pozos de registro sin tapa y un vallado perimetral deficiente por el robo de algunos tramos, incluye un segundo apartado en el que el ayuntamiento apremia a la entidad a dar una solución a este proyecto inacabado.
La resolución municipal dicta que «deberán continuar con la edificación a que tenga obligación y acabarla en los plazos fijados por el plan o el programa y concretados en la licencia municipal» y, en caso de haber superado los plazos para edificar, como se presume, «el ayuntamiento dictará una orden individualizada de edificación o rehabilitación». El concejal de Gestión Urbanística, Fernando Pascual, defendió ayer que el objetivo del gobierno municipal con este requerimiento es «resolver el problema del frustrado centro comercial Vilella». El ayuntamiento reclama una solución que puede pasar bien por finalizar la obra, aunque el inmueble no se destine al fin para el que se concibió, o en última instancia por la demolición de la estructura.
El edil comentó que la Sareb dispondrá de diez días para presentar alegaciones a este requerimiento desde el momento en que reciba la notificación del acuerdo municipal. Pascual incidió en que el primer objetivo del consistorio es que la empresa garantice la seguridad en la parcela con un nuevo vallado perimetral aunque, al mismo tiempo, incidió, se le recuerda que tiene una obra inacabada. En este sentido, comentó que el ayuntamiento simplemente plantea las exigencias «que nos permite la ley». «Hemos estado en contacto con la Sareb, pero no hay forma de avanzar», argumentó el responsable del área de Gestión Urbanística.
Un inmueble en venta
Fuentes de la Sareb señalaron que la estructura de Vilella sigue en venta y que, en estos momentos, la entidad no tiene sobre la mesa ningún proyecto concreto para actuar sobre la misma más allá de tomar las medidas de seguridad necesarias tras el robo de las vallas que rodeaban la parcela y de las tapas metálicas de los pozos de registro.
Como ayer adelantó Levante-EMV, el Ayuntamiento de Alzira ha requerido a la Sareb para que «de manera inmediata» adopte las medidas necesarias para evitar eventuales daños físicos en el sector Viella después de que el inspector municipal detectara la presencia de pozos de registro en los que había sido sustraída la tapa y a los que se podía acceder con facilidad debido a que se han sustraído diversos tramos del vallado perimetral. El ayuntamiento ha sellado los agujeros ubicados en la vía pública y ha emplazado a la empresa a hacer lo mismo en el interior de la parcela, con la advertencia de que en caso contrario asumirá las obras de forma subsidiaria y posteriormente le pasará la factura. Una primera estimación cifra los trabajos en 90.000 euros. Pascual se mostró firme al señalar que «no queremos tener en Alzira ningún caso Julen», en referencia al niño que se precipitó a un pozo en Totalán (Málaga).
