Alzira ya cuenta con una sala para celebrar ceremonias civiles de despedida de difuntos en el cementerio municipal. El consistorio está amueblando la estancia tras invertir 118.000 euros en unas obras que también permitieron ampliar las dependencias destinadas a oficinas y archivo y adaptó los baños para personas con movilidad reducida. La nueva sala para la despedida de difuntos está ubicada en las antiguas casetas de los peones del cementerio.El concejal de Servicios Públicas, Fernando Pascual, argumentó que esta nueva sala permite «que los familiares puedan tener más intimidad y privacidad antes de despedirse de sus difuntos». Según informaron fuentes municipales estará disponible para su uso en muy pocas semanas.