La cubierta del polideportivo Fontana Mogort no corre riesgo de derrumbe, aunque la estructura interior presenta «numerosas patologías» que es necesario reparar antes de actuar sobre el exterior para corregir las filtraciones. Son, en palabras del alcalde de Alzira, Diego Gómez, las principales conclusiones del informe -todavía provisional- encargado por el ayuntamiento para evaluar el estado de esta instalación municipal, que se cerró al público en Semana Santa tras detectar algunas deficiencias mientras se revisaba la cubierta. Gómez anunció que mañana viernes mantendrá una reunión con los ingenieros que han revisado el pabellón para tratar de determinar el plazo de ejecución de las reparaciones que precisa el edificio y, especialmente, su coste.

«El informe provisional realizado por la empresa de servicios de ingeniería y geotecnia plantea que la inspección ha observado numerosas patologías en la estructura interior que se deben principalmente a la ejecución. El inmueble se construyó en 1967 como Mercado de Abastos y después de 52 años y una transformación en polideportivo en la que se eliminaron las columnas centrales presenta problemas», detalló Gómez. El alcalde incidió en que muchas de las actuales patologías son consecuencia directa de que no ha habido un mantenimiento, mientras que otras se derivan posiblemente de la instalación de las placas solares en la cubierta exterior.

Fue precisamente el proyecto para reparar esta cubierta y evitar las filtraciones que registra el pabellón el que permitió que se detectaran deficiencias en la estructura interior. El informe que ayer recibió el gobierno municipal así lo confirma. «Las soldaduras son inaceptables», comentó el alcalde de Alzira, mientras relataba un sinfín de anomalías: falta de tornillos en algunas uniones o tornillos mal apretados, rotura de soldaduras, oxidación de pilares, fisuras en muros, filtraciones en las cubiertas, un drenaje deficiente,... El munícipe señaló que no existe un riesgo de hundimiento, aunque en caso de una emergencia como un incendio la estructura se colapsaría sin aguantar los tiempos de seguridad que estipulan los técnicos, por lo que reivindicó que se actuó correctamente al cerrar la instalación al público al imperar el criterio de seguridad.

Este primer informe recomienda por un lado que se amplíe el estudio de la estructura interna de la cubierta a los pilares y plantea la necesidad de «desarrollar un proyecto completo e integral de intervención y refuerzo de la estructura, que se podría hacer por fases, así como un sistema de drenaje eficaz», explicó. El alcalde también comentó que, una vez se repare, los técnicos consideran que la estructura interna no tendrá problemas en soportar la cubierta con los paneles solares instalados. «Ahora nos falta ver ese proyecto integral, cuál es el plazo de ejecución y cuánto cuesta», incidió. Ante la posibilidad de que la reparación se pueda alargar, y con el fin de ofrecer alternativas a los usuarios de este polideportivo, apuntó que se podría pedir permiso a la Conselleria de Educación para utilizar a partir de septiembre el pabellón del instituto de Tulell.