La Mancomunitat de Albalat-Polinyá, conocida como la 'xicoteta Mancomunitat' se hace cada vez más grande. Ya son ocho los municipios que la componen justo cuando el ente comarcal de referencia, la Mancomunitat de la Ribera Baixa, ha entrado en una fase de desestabilización y luchas internas que la debilitan. La nueva alianza de los pueblos más pequeños ya está integrada por Albalat, Favara, Benicull Fortaleny y Polinyá. Y ahora acaban de incorporarse Riola, Corbera y Llaurí.
La entrada de las nuevas poblaciones fue adoptada por unanimidad en una reunión presidida por la alcaldesa de Fortaleny, Juani Clos. Riola, Corbera y LLaurí pasarán a ser miembros de pleno derecho a partir del 1 de enero de 2021 con la idea de hacer crecer la mancomunidad y tener más fuerza para poder llevar adelante los diferentes proyectos que se están trabajando de manera conjunta.
Proyecto estrella
Cómo proyecto estelar se está intentando promover el reciclaje de residuos para cumplir la nueva normativa de unificar la recogida de todas las secciones en una misma entidad y avanzar hacia una línea más sostenible y óptima para los municipios, de manera que se estudien las características de cada población y se mejore el servicio adaptándolo a las necesidades.
Juani Clos ha aclarado que el objetivo es «optimizar el reciclaje haciendo una recogida selectiva tanto orgánica, de plástico, cartón, vídrio y otros restos» También se estudia la posibilidad de entregar a cada casa cubos para que depositen cada cosa en su sitio. Se estudia si es viable la posibilidad de la recogida puerta a puerta o bien combinando las dos formas, es decir, la orgánica puerta puerta y las demás creando islas de reciclaje para hacer desaparecer los contenedores de los pueblos.
«Se busca desarrollar un sistema selectivo por un futuro más sostenible, trabajando para el medio ambiente con campañas de sensibilización», añade Clos.