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Alzira ofrece una sala de banquetes para albergar el examen de la PAU

Personal de la Politècnica visita hoy los salones para valorar si reúnen las condiciones para la prueba

Imagen de una de las salas de Cotonera Events en Alzira. | V. M. PASTOR

El Ayuntamiento de Alzira ha ofrecido a la Universitat Politècnica de València (UPV) los salones de la empresa de banquetes Cotonera Events para mantener en la ciudad la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) y evitar que cientos de alumnos de varios municipios de La Ribera tengan que desplazarse a València tres días consecutivos durante los exámenes programados para el mes junio. Personal del vicerrectorado que organiza la selectividad se desplazará hoy a Alzira para estudiar si las dependencias reúnen las condiciones para celebrar la prueba.

Cotonera Events cuenta en Alzira con varias salas de banquetes que, ubicadas en un mismo complejo, suman cerca de 4.000 metros cuadrados. La más grande tiene 1.300. Los propietarios de esta empresa de restauración ofrecieron sus instalaciones al ayuntamiento y a las autoridades sanitarias para organizar la vacunación masiva y el alcalde aprovechó la propuesta para, tras conocer que la UPV estaba abierta a mantener la sede de la PAU en Alzira si disponía de una dependencia única lo suficientemente amplia, recabar su conformidad para poner los salones a disposición de la UPV.

El ayuntamiento había barajado ofrecer también el pabellón polideportivo, aunque se ha descartado por falta de condiciones y la ausencia de aire acondicionado pensando que los exámenes se celebrarán en junio, en el caso de la convocatoria ordinaria, y julio, la extraordinaria. Por contra, el alcalde considera que el emplazamiento de estas salas de banquetes es óptimo ya que tienen justo al lado la estación de Renfe, lo que facilita la llegada a estudiantes de Carcaixent o Algemesí que suelen realizar la PAU en Alzira y, además, pensando en los estudiantes de la localidad, hay un acceso peatonal, pero también transporte público.

La comunicación de la UPV de que el selectivo se celebraría este año en València - el año pasado, ya con la pandemia, los alumnos realizaron los exámenes en sus respectivos centros aunque esta posibilidad se ha descartado para no entorpecer las clases- provocó que el Consell Escolar Municipal decidiera elevar una queja a la conselleria. Ese malestar se ha transformado en una moción conjunta de todas las fuerzas políticas representadas en el ayuntamiento, que previsiblemente se aprobará esta tarde en el pleno, que reclama la celebración de estos exámenes en la ciudad como se ha hecho tradicionalmente. Paralelamente, las gestiones realizadas por el alcalde han propiciado el ofrecimiento de estos salones de banquetes que hoy visitarán los técnicos de la UPV, según confirmó ayer la concejal de Educación Maria Calvo.

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