El verano se saldará finalmente en Cullera con buenos datos de ocupación y precios de alquiler de apartamentos turísticos pese a los temores y malos augurios desatados en las semanas previas al inicio de la temporada estival. Durante julio y agosto las cifras de residentes y visitantes parecen alimentar el optimismo. Después de unos meses de total incertidumbre, las inmobiliarias de Cullera han recuperado la confianza en el sector turístico, muy afectado por el impacto provocado por la alarma sanitaria, dado que las sucesivas oleadas de contagios sembraron muchas dudas y anulaciones de reservas ante la siempre temible evolución de la pandemia.
Cuando están a punto de concluir los dos meses más importanetes de la temporada, la asociación de inmobiliarias de Cullera (ASIM) valora «de forma muy positiva este verano del 2021, en el que, a pesar de la incertidumbre inicial y el importante número de reservas que se anularon era muy preocupante al aumentar las restricciones a la mobilidad, al final se ha confirmado un buen momento gracias en especial al turismo nacional, que se ha visto a última hora refrendado también por el turismo internacional».
La respuesta del sector al desasosiego social que provocó la multiplicacoión de los contagios se ha basado en ofrecer mayores dosis de seguridad sanitaria en los destinos turísticos y precios competitivos. Y la respuesta de los consumidores ha sido muy positiva.
Las inmobiliarias han trabajado en dos frentes muy concretos. Por un lado se ha intentado mostrar confianza al cliente con datos contrastables sobre las acciones preventivas implantadas en los destinos turísticos tanto al mostrar una oferta de apartamentos que cumplen todas y cada una de las normas y recomendaciones vigentes de las autoridades sanitarias como al detallarse las medidas acordadas por el ayuntamiento y la Generalitat para luchar contra la pandemia. Por otro lado, muchos empresarios del sector han apostado por un mercado muy competitivo manteniendo los precios no solo del verano anterior sino de los veranos precedentes, es decir de 2018 y 2019.
Para todos los bolsillos
La ventaja que ofrece Cullera al usuario de apartamentos turísticos, aparte de su excelente situación sanitaria, son unos precios, siempre asequibles y adaptables a las necesidades del posible usuario con una oferta amplia y variada.
Los profesionales del sector inmobiliario defienden que los precios de los apartamentos turísticos en Cullera son diversos y dependen de muchos condicionantes como la cercanía o no de la playa, la presencia o no de piscina y de una plaza de aparcamiento.
De esta manera, un piso de dos habitaciones en primera línea de mar podría costar la primera quincena de agosto alrededor de los 2.000 o 2.200 euros. Un piso con condiciones parecidas en segunda o tercera línea de la playa vería rebajado su precio aproximadamente a la mitad. A partir de ahí los precios caen a medida que nos alejamos de la orilla del Mediterráneo. La segunda quincena de agosto se consigue una rebaja de entre el 10 y 15 % dependiendo de la zona.
Esta circunstancia también se aplica en los precios del mes de julio, pero a la inversa, siendo más barata la primera quincena y un poco más cara la segunda por razones obvias.
Estos precios hacen que la oferta turística en cuanto al alquiler de apartamentos de Cullera se convierta en otro atractivo más para aquellos que quieren visitar la ciudad. Una sensación que ha quedado demostrada con una ocupación de los alojamientos turísticos superior al 85 % en un mes de agosto en el que la pandemia, aunque de forma indirecta, se ha dejado notar. Es de destacar la presencia masiva del turismo nacional en las solicitudes de apartamentos y alojamientos turísticos aunque se nota también la presencia de franceses, ingleses y alemanes, fieles a su cita de Cullera como destino turístico.
El sector salva una temporada que sigue lastrada por el virus
Las buenas cifras de ocupación de los apartamentos turísticos se verán refrendadas con un resultado también positivo en las pernoctaciones hoteleras y por un índice de actividad muy aceptable en la hostelería. Aunque todavía no se dispone de los datos definitivos, todo indica que la gran afluencia de visitantes que ha recibido Cullera en agosto se traducirá en un balance muy positivo de una temporada que despertaba muchos recelos.
