La UD Alzira adelantó la noche terrorífica de Halloween al CD Toledo al lograr la victoria en El Salto del Caballo por 1-2 e infringir la séptima derrota de la temporada al conjunto castellano. Afortunadamente no se cumplió el dicho de a entrenador nuevo, victoria segura y, aunque el juego del Toledo mejoró, volvió a caer para que el conjunto ribereño suba a la décima posición. Recuperado de su lesión, Juanma volvió a la titularidad, junto a Pawel, Estacio, Kaiser y Javier Soler. Marenyà, Lado, Selfa y Zarzo ocuparon la zona ancha. Éste por la derecha para dejar todo el carril izquierdo a Juanma. Chema Moreno y Germán eran la dupla de ataque.
Aunque los blanquiverdes gozaron de las primeras ocasiones, el Alzira fue el que se adelantó con un gol de Marenyà a centro del Chema Moreno en el minuto 23. Pero no sería el único mazazo ya que ocho minutos después Javi Zarzo refrendó el aviso dado minutos antes. El de Benaguasil encañonó una ‘folha seca’ inalcanzable para Olmedo. Lado incluso estuvo cerca de anotar el tercero para los suyos.
Los del Salto del Caballo no querían caer a la última plaza a la que estaban destinados tras la sorprendente victoria del próximo rival alzirista, el Marchamalo de Guadalajara, que se impuso al Mar Menor. Los de Javi Sánchez reaccionaron en el segundo acto. Su goleador, Migue García, tuvo dos ocasiones, la primera de las cuales se estrelló en el poste en el primer minuto. El técnico del Grau empezó a hacer cambios. Sesé salió por Germán y Abel por Zarzo para reforzar el flanco izquierdo. Para retener el balón y organizar el juego, Carlos Pérez entró en el 63 por Selfa. Otro cuero al palo, en este caso de Arturo en el minuto 70, hacía prever que podía llegar el primer gol de los locales.
Excelso trabajo defensivo
Abel intentó cerrar el encuentro aunque su disparo no llevó demasiado peligro. A diez para el final, entraron Jordi Méndez y Traver por Juanma y Chema Moreno. El recién incorporado Cedric sí encontró un hueco entre los tres palos que les hizo albergar esperanzas de conseguir el empate. Los últimos minutos, incluidos seis interminables de añadido, fueron bien trabajados defensivamente para que el meta polaco no tuviera que realizar ninguna gran intervención. Como un veterano, Sesé intentó arañar segundos reteniendo balones en el córner del campo contrario.
Estos tres puntos serán de oro si se refrendan el sábado con otra victoria contra el excolista, Marchamalo. El partido se jugará a las 18 .00 horas para evitar coincidir con el Valencia, que juega el domingo a las 16.15 horas contra el Atlético de Madrid.
