Cuando se dice aquello de que un pequeño gesto basta para cambiar el mundo no siempre es una frase manida. Por ejemplo, en la preservación del planeta. La Ribera genera aproximadamente 1,6 millones de toneladas de CO2 cada año, según se desprende del primer inventario de gases de efecto invernadero desarrollado por la Conselleria de Transición Ecológica. El 21 % de estos emanan directamente de los automóviles privados.
El coche ofrece una autonomía para la movilidad que le ha convertido en una herramienta indispensable de uso diario para la mayoría de la población. Tanto es así que no resulta complicado encontrarse con familias con más de uno en posesión. A esta comodidad y libertad que da el vehículo privado hay que sumarle una red de transporte público que se encuentra muy lejos de ser una opción atractiva. Quien depende de autobuses o trenes sabe bien que los improvistos surgen con más frecuencia que la deseada.
Todo ello se traduce en un uso mayoritario, que en ocasiones roza el abuso, del automóvil privado. Y es algo que tiene sus consecuencias. El citado estudio cifra la emisión de gases de efecto invernadero en 1,6 millones de toneladas de CO2 al año en la comarca. De estos, 342.720 proceden de coches, lo que supone el 21,4 % del total. De hecho, si se analizan las principales fuentes de contaminación de cada municipio, los vehículos privados encabezan la gran mayoría de las listas.
Solo cinco poblaciones escapan de esta tendencia. Uno de ellos es Almussafes, donde los coches son el segundo foco de emisiones por detrás de la manipulación de la pulpa, que representa el 34,5 % de los gases registrados anualmente. Situación idéntica se produce en Alzira, donde la pulpa es la actividad más contaminante (22,6 %), por encima del automóvil privado (20,51 %). En el caso de Benimodo, la quema de combustibles necesaria para elaborar productos químicos representa el 26,2 % de las emisiones contaminantes anuales, por encima del 17,3 % que son provocadas por los vehículos privados. Corbera es otra de las localidades con una fuente de emisiones mayor que los coches (13,53%): los tractores industriales (29,65 %). Motores de combustión, en uno y otro caso. En Manuel también es la manipulación de la pulpa el origen principal de CO2, con casi un 25 % frente al 21,5 de los vehículos.
Precisamente, los tractores o los camiones se encuentran entre las fuentes más contaminantes en varios municipios de la comarca. En el caso de los primeros, se superan las 70.000 toneladas de CO2 anuales. En el segundo, se trata de una aportación de gases a la atmósfera que alcanza las 130.468. Si esto se suma a los automóviles privados, se sobrepasa el medio millón de toneladas.
Consumo energético
El consumo energético se encuentra, también, entre las principales fuentes de contaminación de la mayoría de localidades de la comarca. Los hogares, o más bien sus equipamientos, son los responsables del 11 % de las emisiones de gases anuales. La quema de combustibles, ya sea gas, gasóleo o leña, desprende 96.855 toneladas de CO2 al año. Por su parte, la energía eléctrica alcanza los 83.323. Fuera de las casas también se consume electricidad. En el caso de la industria, la factura de la luz acarrea 90.886 toneladas de CO2 más a la atmósfera.
De igual modo, las actividades empresariales no solo contaminan mediante la electricidad. Como ya se ha mencionado con anterioridad, la manipulación de la pulpa se encuentra entre los focos más contaminantes de varias localidades. En los principales focos se sobrepasan las 120.000 toneladas anuales. De igual modo, la ganadería es responsable directa de más de 40.000 toneladas de CO2 cada año. A esto habría que añadir el procesamiento de alimentos, que sobrepasa las 20.000 toneladas. Por no mencionar las decenas de miles derivadas de la producción de químicos, fabricación de maquinaria o construcción, entre otras fuentes industriales.
El aire acondicionado se dispara en Guadassuar, Benifaió y Albalat
El inventario de gases de efecto invernadero desarrollado por la Conselleria de Transición Ecológica elabora, en cada munidipio, un listado con las principales fuentes de contaminación. El uso del automóvil, elconsumo energético o ciertas actividades industriales destacan por encima del resto. Aunque en tres localidades figura como uno de los focos más importantes el uso de refrigeración o aire acondicionado. Una de ellas es Benifaió, donde las emisiones de CO2 derivadas de este tipo alcanzan las 3.591,72 toneladas anuales. Esto quiere decir el 5 % de los gases registrados, por encima del consumo eléctrico de los hogares. En Guadassuar, la refrigeración es la segunda fuente de contaminación, por detrás del coche, con 3.129 toneladas de CO2 anuales (10,4 % del total). Por último, este concepto genera 1.505 toneladas de CO2 en Albalat, lo que supone el 8,8 % de las emisiones de gases.
