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Unánime exigencia en Alzira de dinero para evitar inundaciones

El pleno reitera un año después que se priorice la ampliación del Casella

Vista del Pont de Xàtiva sobre el barranco de la Casella y la confluencia de la CV-50 con la CV-41. | PERALES IBORRA

El Ayuntamiento de Alzira reiteró ayer de forma unánime la demanda de inversiones al Gobierno central para proteger la ciudad de las inundaciones que provocan los barrancos, una petición que ya elevó hace ahora un año también con un consenso general, si bien la resolución aprobada anoche a propuesta de la Federació d’Associacions de Veïns (Faavv) es más concreta al reivindicar una partida de 26 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado de 2023. Se trata del importe estimado por la empresa que ha elaborado por encargo de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) el estudio de alternativas para reducir el riesgo de inundaciones en la Ribera.

Si bien la CHJ no ha presentado públicamente el trabajo de Typsa, la federación de vecinos sí ha desvelado que las propuestas que contempla consisten en una ampliación del barranco de la Casella desde la «tancà» de Sant Antoni -aproximadamente donde el Barranc de l’Estret confluye en él- hasta el Xúquer, la reordenación del enlace de la variante (CV-50) con la antigua carretera de Carcaixent (CV-41) derivada de la necesidad de ampliar el Pont de Xàtiva con la construcción de una rotonda que eleve la cota actual a la altura de la mota de protección y la regeneración de los terrenos del frustrado centro comercial Vilella para, además de actuar como tanque de tormentas, una función que ya realizan, se adecuarían como parque urbano.

La propuesta de la FAAVV que ayer refrendó el pleno por unanimidad señala que el informe encargado por el Ayuntamiento de Alzira a la cátedra de hidráulica de la Universitat Politècnica de València (UPV) coincide en el diagnóstico y la solución que plantea Typsa, que parte de la imperiosa necesidad de ampliar el Pont de Xàtiva, convertido actualmente en un cuello de botella ya que únicamente permite el paso de 70 m3/sg cuando el caudal estimado en una avenida que se puede producir cada cinco años es de 480 m3/sg.

Encualquier caso, el portavoz de la FAAVV, Voro Pérez, incidió en la conveniencia de que el ayuntamiento encargue un estudio de alternativas técnicas al actual enlace de la CV-50 con la CV-41 de forma que los ciudadanos puedan elegir la opción mas adecuada y no dudó en señalar que «la mejor herencia» que se puede dejar a la futura corporación es una solución consensuada.

La petición elevada por el ayuntamiento al Gobierno central reclama además que se priorice la ampliación del barranco de la Casella de forma que los caudales que ahora recibe de las cuencas de l’Estret, el barranco de Vilella y del propio valle de la Casella «no alcancen los niveles actuales» y permitan desguar tanto a los colectores de Les Basses como al canal interceptor para evitar las inundaciones en el casco urbano. Una crecida del barranco de la Casella obliga en la actualidad a cerrar las compuertas e impide que puedan desaguar tanto del Canal de Les Basses como del colector de esta barriada.

El gobierno local rechazó en el pleno la petición del PP para crear una comisión de seguimiento que trabajara en consensuar una solución sobre cómo se debe abordar la ampliación del barranco de la Casella y la confluencia de la CV-50 con la CV-41, argumentado que ya existe una comisión informativa de Infraestructuras de la que forman parte todos los grupos.

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