El Ayuntamiento de Montroi ha solicitado el apoyo de la unidad de Riesgos Geológicos de la Diputació de València para corregir el peligro de desprendimientos en las calles Romaní y Geòleg, donde los últimos episodios de fuertes lluvias han provocado desprendimientos de arcillas sobre la vía pública. «Las lluvias nos han demostrado que hay un problema gordo al que hay que dar solución», comentó el alcalde, Antonio Carrascosa, tras la visita a la zona del técnico de la corporación provincial para inspeccionar la zona y planificar las actuaciones que se deban realizar.
Carracosa detalló que en su día se levantaron gaviones para contener las arcillas y tierras que se pudieran desprender de la montaña aunque, con el tiempo, dijo, «esas contenciones se han visto sobrepasadas porque poco a poco la tierra ha ido llenando el hueco que se dejó y la tierra cae directamente a la calle», explicó, mientras recordaba que en este tramo la montaña tiene una pendiente muy pronunciada.
El munícipe comentó que, si bien no parece que haya un peligro de que estos desprendimientos afecten a las viviendas más próximas, que son pocas, no se trata tanto del número como de la existencia de un riesgo «porque al final puede haber coches aparcados en la calle, que además queda inutilizada cuando hay un desprendimiento, y existe un peligro de que este pueda alcanzar a una persona que camine por la zona», indicó.
Antonio Carrascosa señaló que, tras la inspección ocular, los técnicos del área de Riesgos Geológicos de la diputación son los que determinarán cual es la mejor solución para corregir esa situación «y nos pondremos en marcha».
El alcalde de Montroi agradeció la celeridad con la que la corporación provincial ha atendido la llamada. «Los ayuntamientos no disponemos de técnicos tan específicos para este tipo de actuaciones, por eso llamamos a la diputación y enseguida han venido para ver cual es la solución más viable», comentó.
