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La «maerà» de Antella recibe el último aval para ser Patrimonio de la Humanidad

La candidatura internacional llega a la convención de la Unesco que se celebra en Rabat del 28 de noviembre al 3 de diciembre

Descenso de troncos por el Xúquer. | FERMÍN GARCÍA

La Associació Cultural de Maeros del Xúquer empieza a saborear la posibilidad de que la Unesco declare Patrimonio de la Humanidad la práctica milenaria del transporte de troncos a través de los ríos. El órgano evaluador de la Unesco ha recomendado su inscripción en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad tras examinar la candidatura del Timber Rafting, que agrupa a asociaciones de Austria, República Checa, Alemania, Letonia, Polonia y España que mantienen viva esta tradición. La «maerà» en el caso de Antella y bajo otras denominaciones -gancheros, raiders o raftters – en otras cuatro comunidades de España: Navarra, Aragón, Catalunya y Castilla-la Mancha.

El presidente de la asociación, Leo Part, destacó ayer que, por la información consultada, el aval de este órgano evaluador representa un paso casi definitivo para obtener una declaración que se debe refrendar en la 17ª sesión del Comité Intergubernamental para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial, que se reunirá del 28 de noviembre al 3 de diciembre en Rabat (Marruecos). «La Unesco se lo ha comunicado al presidente de la International Association of Timber-Rafstem, Frank Thiel, que a su vez ha transmitido «la mejor noticia que podíamos esperar para que se haga realidad un sueño» a los integrantes de la candidatura.

La conducción de troncos por el cauce del Xúquer está documentada desde el siglo XII e incluso cuando en el siglo XIII se construyó el azud de la Acequia Real se estableció que se debía dejar un paso tanto para embarcaciones «como para la madera que baja por el río». Esta práctica se mantuvo hasta el siglo XX, cuando el transporte de troncos por vía fluival fue sustituido progresivamente por el ferrocarril y, más tarde, por el transporte por carretera. La construcción de la presa de Tous supuso el final de este sistema de transporte a finales de los años sesenta.

La Associació Cultural de Maeros del Xúquer recuperó en abril de 2012 esta tradición milenaria con la celebración de la fiesta de la «maerà» y se ha repetido con posterioridad, cada mes de julio, con el descenso de hasta diez toneladas de madera mediante el sistema de flotación de piezas sueltas. La entidad celebra este año el décimo aniversario de la recuperación de esta práctica en la Ribera. Part ha agradecido el trabajo realizado en esta última década por la anterior directiva de la IATR, presidida por Àngel Portet, «gracias al cual estamos a punto de hacer realidad nuestro sueño y que la ‘maerà’ de Antella tenga la misma consideración que la Festa de la Mare de Déu de la Salut, las Dallas, el Tribunal de las Aguas o el Misteri d’Elx».

«El título pondrá a Antella en el mapa del mundo»

«Exultantes». Así definió ayer Leo Part la alegría de los miembros de la Associació Cultural de Maeros del Xúquer tras recibir la comunicación del presidente de la IATR que comunica la recomendación del órgano evaluador para que el transporte de troncos por el río sea Patrimonio de la Humanidad. Los integrantes de la entidad tienen su mirada puesta en Rabat, donde esperan que el jueves 1 de diciembre por la mañana -no se descarta que si las deliberaciones son ágiles pueda ser incluso el día anterior- se pueda confirmar la concesión del reconocimiento como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. «Situamos a Antella en el mapa del mundo con este título», destacó Leo Part.

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