El Hospital San Francesc de Borja de Gandia ha implantado un nuevo sistema de dispensación automático de los uniformes del personal. Se trata de un equipamiento de última tecnología que comprende dos máquinas para recoger la ropa y otras dos retornadoras. Este sistema está ubicado junto al servicio de lencería y en el bloque quirúrgico.

Los trabajadores disponen de una tarjeta identificativa en la que previamente se han registrado las necesidades de ropa según el cargo que desempeñan en los departamentos del hospital. Un administrativo solo tendría autorización para obtener batas blancas, por ejemplo, mientras que un empleado sanitario de la UCI puede obtener un pijama (chaquetilla y pantalón) de color violeta, que es el color del servicio, puesto que el de los quirófanos es verde y la de hospitalización, blanca.

El proceso de recogida de material es sencillo. El personal ha de deslizar la tarjeta por el lector y seleccionar las prendas que necesita y la talla y esperar unos segundos a que la máquina se lo envíe. En el caso de vuelta del uniforme, el empleado únicamente tiene que pasar la tarjeta por la máquina y depositar la ropa usada en el espacio dispuesto para ello. Todo el proceso queda registrado en ordenadores informáticos de manera que todos los movimientos de las prendas quedan controlados para que el servicio de Logística pueda conocer la cantidad, el tipo de material y quien lo está utilizando para mejorar las existencias de ropa, evitar que la ropa se pierda y se ahorre en uniformes.

Una de las grandes ventajas es la adecuación del consumo de material a las necesidades reales del personal. El objetivo es que cualquier tipo de uniforme esté disponible acorde a su uso en el momento exacto. Con esto, se pretende incrementar tanto la comodidad del trabajador como la higiene del centro hospitalario.

Además, el sistema garantiza que cada usuario disponga de su uniforme gracias a las nuevas tarjetas.