esta semana conocíamos que el Gobierno de Gandia ha recortado en 1,3 millones de euros el servicio de limpieza de la ciudad. Si, por desgracia, ya vemos como la ciudad está más sucia que nunca, a partir de ahora los ciudadanos vamos a tener que convivir con la suciedad.

Menos contenedores, menos barrenderos, menos servicios de recogida de basura en los barrios de la periferia, es decir, se van a crear dos Gandias. La Gandia de primera donde habrá un «servicio insuficiente» y la Gandia de segunda que tendrá un «servicio precario».

Pero no solo eso, además se reduce un equipo de baldeo, se reducen de 28 a 22 los circuitos de barrido manual en días laborales, y de 9 a 7 en días festivos, se reducen de 4 a 3 los circuitos de barrido manual en el Grau, se reducen de 4 a 2 los peones en temporada baja, barrido manual en la playa, se reducen en un 25,26% las inversiones, lo que significa la no adquisición de aproximadamente 800 contenedores nuevos, se reduce el importe de las inversiones en el servicio de limpieza viaria en un 35,75% con lo que no se van a adscribir al servicio 21 unidades de vehículos Porter, dos cisternas baldeadoras y tres furgones hidrolimpiadores, entre otros muchos.

A todo eso hay que recordar que este gobierno de PSOE y Més Gandia apoyado por Ciudadnos ha aumentado brutalmente los impuestos, mientras la lista de enchufados, o como a ellos les gusta decir, endollats, no para de aumentar cada vez más y a costa del bolsillo del ciudadano.

Mientras el ciudadano paga, el gobierno hace la fiesta. Y es que el tijeretazo que el Gobierno de Gandia va a aplicar al servicio de la limpieza de la ciudad no tiene precedentes. Por desgracia esa va a ser nuestra carta de presentación al turismo, ya que especialmente en el Grau y en la Playa se va a reducir la limpieza.

Los que prometían en campaña hacer de los servicios públicos su bandera, se han convertido en los privatizadores absolutas de cualquier servicio del ayuntamiento. Todo ellos con un único objetivo, enchufar a los suyos y a cuantos más, mejor. Sea del partido que sea, PSOE en el primer puesto del ranking, seguido de Més Gandia (Compromís, Esquerra Unida y Esquerra Republicana) y en la cola, pero no con menos enchufados, Ciudadanos. Claro está, a este último, le tendrá que devolver el favor por haberles dado la alcaldía. En política todo tiene un coste. Y este es el coste que nos toca pagar a los ciudadanos por tener un gobierno que los propios ciudadanos no eligieron.