La idea que el Ayuntamiento de Oliva ha planteado al Ministerio de Fomento para crear accesos al polígono de Jovades y a las futuras zonas industriales, además de eliminar muchos puntos negros en la N332, surgió a raíz del proyecto que se ejecutó en Gandia para facilitar la entrada de vehículos al polígono comercial de Benieto, donde se encuentran, entre otros, los establecimientos de Leroy Merlin y Decathlon. En ese lugar se construyó un pequeño carril de desaceleración desde la ronda de la N332 cuya tramitación se llevó a cabo entre el ayuntamiento y el Ministerio de Fomento y que acabaron financiando las empresas instaladas en ese sector, directamente beneficiadas por la obra.