«En tan solo tres días hemos llenado el salón de actos de la Marquesa», comenta Maria Dolors Tur, miembro de la coordinadora de las AMPA de Gandia. Ya no quedan localidades libres para asistir a la jornada del próximo 2 de febrero, a la que se han inscrito unas 180 personas. «Y ya tenemos lista de espera». Ante el éxito de la iniciativa, y viendo que el problema de la adicción tecnológica de los más jóvenes preocupa mucho a los padres, están pensando en organizar un segundo encuentro. «Vamos a hablar de prevención, no de intervención», señala por su parte otra integrante de la coordinadora, Patricia Villena, «desde el punto de vista de la salud y de la educación». La adicción al móvil «les afecta mucho a nivel físico». Dolores musculares, problemas oculares y falta de sueño y concentración son algunos síntomas.