Los españoles y valencianos tenemos una de las esperanzas de vida al nacer más altas de todo el mundo y, por lo tanto, un mayor número de personas mayores y de enfermedades complejas.

El aumento de las enfermedades crónicas y del número de personas que las padecen constituye un problema de salud de primera magnitud por el dolor y consecuencias que aquellas acarrean y por el elevado gasto de recursos sanitarios que se necesita para su atención.

Ante una situación de vulnerabilidad de nuestra salud, todas las personas necesitamos tener un profesional, que sea siempre el mismo, en el que confiar y que conozca nuestra situación personal, familiar y social.

Mientras esto es así para consultar problemas con el médico, hasta hace tres años no era así para la enfermera, la cual tenía su jornada organizada por actividades asistenciales (curas, inyectable, sintrones, lavados óticos?)

Básicamente la salud es el resultado del impacto que nuestro entorno y estilo de vida, a lo largo del tiempo, tienen en la herencia genética que hemos recibido y, por consiguiente, es muy importante promover la salud en todos los entornos, cuidarla en todas las etapas de la vida y reducir las desigualdades, y para ello es necesario reorganizar el sistema sanitario y orientarlo hacia la cronicidad (líneas estratégicas del IV plan de salud de la Comunidad Valenciana). En esta reorganización del sistema sanitario los Centros de Salud de Atención Primaria deben constituir el núcleo principal donde se diagnostique, se trate y se controle la evolución de los procesos por parte de los médicos de familia y se proporcionen los cuidados de mejor calidad por parte de la enfermera comunitaria, los que serán más eficaces si cada persona los recibe de un solo profesional.

¿Por qué es importante pasar de un modelo en el que cada día (por turnos) una enfermera realice todos los inyectables, otra todas las curas, otra electrocardiogramas etc. de todos los pacientes que acuden al centro de salud ese día, a otro en el que cada enfermera atiende todas las necesidades que puedan presentar sus pacientes asignados?

A modo de ejemplo-respuesta, si un paciente con una herida es atendido cada día por un profesional éste no puede evaluar correctamente como está evolucionando la herida, pues desconoce, en muchos casos, cómo estaba los días anteriores, qué modificaciones en la cura se le realizaron, etc. Lo mismo que ocurre con los cuidados de enfermería en problemas crónicos, como la diabetes, la hipertensión arterial, el aumento de colesterol, etc.

Por ello, en estos tres últimos años, la dirección de Atención Primaria (AP) del departamento de salud de Gandia ha modificado la organización del trabajo enfermera en los todos los centros de AP con el objetivo de recuperar a la enfermera como referente de un grupo poblacional (coincidente con el cupo médico), pasando de realizar actividades a cualquier usuario de su zona para encargarse de todo lo que necesite su cupo de referencia.

Pero, además, con este modelo organizativo se favorece la relación paciente-enfermera comunitaria, lo que permite un aumento en la confianza y conocimiento mutuos, fortaleciendo así la relación terapéutica paciente/enfermera, y, por otro lado, permite que el profesional se sienta responsable en materia de salud y enfermedad de su población.

El objetivo es conseguir el mayor grado de salud que cada persona pueda alcanzar mediante los cuidados y las acciones de promoción y prevención necesarias, potenciando el autocuidado y la atención de la población en su medio, además de generar una actitud proactiva de los profesionales para ofrecer los cuidados necesarios de su población. Secundariamente, si las personas mejoramos nuestra salud en nuestro entorno reduciremos el consumo de servicios hospitalarios y de tecnología de última generación, haciendo que los recursos lleguen a más personas.