Desde que llegó a España, el Black Friday, que se celebra el último fin de semana de noviembre, supone el inicio de la campaña comercial navideña, sin lugar a dudas la más importante de todo el año. A nivel laboral significa que un gran número de los contratos que se realizan para reforzar esas semanas con mayor afluencia de clientes se han adelantado a finales de noviembre. Esa es la tendencia que muestra la estadística de Labora en los últimos años, donde el penúltimo mes suma más contrataciones que diciembre.

Pero la campaña comercial de la Navidad 2020 también va a ser muy diferente, como todo este año, y ni siquiera las agresivas promociones que ya todos los comercios ofrecen por el Black Friday (que ahora se alarga varios días y que incluso se adelanta) han permitido remontar hasta datos económicos de ejercicios anteriores.

Uno de los puntos fuertes de cara al último mes del año son las contrataciones que tradicionalmente se hacen para poder asumir el aumento de la demanda. Pero las incorporaciones para afrontar los venideros días de compras y consumo han descendido en noviembre un 17% respecto al mismo mes del año anterior. Si en 2019 se concertaron 7.225 contratos, la cifra ha decaído en este extraño ejercicio hasta los 6.006, superando por los pelos la barrera psicológica de los 6.000. Los hombres suscribieron más de 1.000 contratos más que las mujeres, 3.516 en lo que respecta a ellos y 2.490. Por sectores, tiran los servicios, que registran la cifra más baja de contrataciones que en ejercicios anteriores, con 3.411, pero también la agricultura, que incorpora a la campaña citrícola 2.086 contratos (no personas, porque un mismo trabajador puede encadenar varios contratos).

Esa cifra coloca a noviembre de 2020 como el peor en lo que a contratos se refiere desde el año 2012, cuando el país vivía plena crisis económica, al borde del rescate y se ponía el foco, y mucho, en algo conocido como la Prima de Riesgo, que para entonces estaba desbocada (en verano de ese año alcanzó los 650 puntos y hoy está en 64).

Es cierto que ya en noviembre del 2019 se vislumbró un importante descenso en el número de contrataciones, fruto de una ligera contracción del consumo y también de la estabilización de las estadísticas laborales tras el rebote de los años de la recuperación.

En todo caso, habrá que estar atento al comportamiento de los consumidores en las próximas semanas. Los comerciantes confían en que la Navidad, pese a todo, será una buena campaña, aunque no llegue a los niveles de ejercicios anteriores. Cabe la posibilidad de que la gente se lance en masa a comprar y que alguna empresa se vea en la necesidad de tener que contratar. Los empresarios de Gandia, capital comercial por excelencia de la Safor y alrededores, afrontan la campaña con «ilusión» y también «optimismo».

El paro baja en 95 personas

En la comparativa con el pasado mes de octubre de este 2020, noviembre también sale perdiendo, con casi 1.800 contratos menos suscritos, en este caso gracias al impulso de la agricultura, que registró de 3.000 contratos, y un mejor comportamiento de los servicios, que se acercó a los 4.000.

Al margen de las contrataciones de cara a la campaña de Navidad, las cifras del paro prácticamente se mantienen respecto a octubre. La Safor ha registrado 95 desempleados menos, por lo que la línea es plana. La comarca cerró el pasado mes de noviembre con un total de 14.882 personas registradas como demandantes de empleo, que son 1.886 más de los que había en el mes de noviembre del año pasado, lo que supone un 14,5% más.

En el acumulado por ciudades, la capital comarcal, Gandia suma re 7.748 parados a finales del mes de noviembre. Oliva cuenta con 2.183, mientras que Tavernes de la Valldigna registra 1.232 demandantes de empleo.