La UE Tavernes no estará solo ante su mayor desafío de los últimos tiempos. Varias decenas de aficionados, más de un centenar, le acompañarán a las 20.30 horas de hoy en el campo del Rayo Llíria CF para intentar superar al equipo edetano y meterse en la gran final por el ascenso a tercera división.
Los seguidores se desplazarán en autobuses fletados por la directiva, pero también viajarán muchos valleros en sus coches particulares. El club cuenta con un centenar de entradas proporcionadas por el equipo rival.
El cuadro «roget» defiende una ventaja de 1-0 que consiguió en el partido de ida disputado el pasaso viernes en su campo. A los de Ximo Enguix le valen varios resulados ante el Rayo Llíria CF para acceder al encuentro decisivo por el ascenso, que se jugaría el domingo en el estadio La Murta de Xàtiva.
Pese a la diferencia provisional en la eliminatoria, el entrenador local avisa: «no vamos a salir a especular con el resultado, pues puede ser perjudicial ante un gran equipo que contará con el apoyo de su afición. Vamos a intentar hacer nuestro juego, sabiendo lo mucho que nos jugamos. Hay que actuar con suma concentración, ya que cualquier despiste puedes pagarlo caro en esta clase de compromisos».
El que también está esperanzado es el presidente, Josep Emili Bononad, quien ayer recordaba a este periódico que «el año pasado perdimos en los penaltis y hace cinco años caímos en los dos partidos. Ya nos toca triunfar».
