El IES de Villalonga denuncia la falta de respuesta tras la agresión al profesor

Una parte de la comunidad escolar del instituto de educación secundaria Vall de la Safor de Villalonga ha vuelto a salir este mediodía a la calle para mostrar su frustración ante la «falta de respuesta» de la Conselleria de Educación tras la agresión que el pasado 22 de enero sufrió un profesor por parte de un alumno.

La protesta, que ha tenido lugar a las 2 de la tarde, ha reunido a alumnos, profesores, padres y alcaldes de algunos de los 11 municipios adscritos a este centro escolar en el que están matriculados unos 600 alumnos y alumnas cuando la cifra óptima ronda los 400.

Tras aquella agresión, que afectó a un ojo del profesor y que requirió su traslado al hospital debido a la gravedad de la lesión, la comunidad escolar de Villalonga reclamó más medios a la Conselleria de Educación, pero esa respuesta a día de hoy no se ha producido.

Lo cuenta la presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos, Isabel Muñoz, entidad que ha promovido la protesta de este mediodía. Muñoz detalla que para atender debidamente a los más de veinte alumnos que proceden de dos centros de acogida de menores tutelados por la Generalitat se solicitó al inspector de Educación la presencia de más sicólogos emocionales y que se estudiara la medida de distribuir a esos estudiantes, uno de los cuales fue el autor de la agresión al profesor.

La idea consiste en que el IES Vall de la Safor acoja a los menores tutelados de uno de esos dos centros y que los del otro se matricularan, con la dispersión que se considere más oportuna, en otros institutos de las poblaciones más cercanas. Además, proponen que cuando se detecten conductas violentas los tutores lo comuniquen a los institutos para que se adopten medidas de contención, sin descartar que se dote a los centros de acogida de personal docente para que cursen estudios en ese mismo lugar.

«La actual situación altera el normal desarrollo de las clases y en general de la actividad en el instituto de Villalonga», añade la presidenta del AMPA, quien revela que por parte de la inspección de la Conselleria de Educación les informaron que, ante sus demandas, «no podían hacer más».

«Nos sentimos abandonados», concluye Isabel Muñoz, que prepara una carta que remitirá a las autoridades educativas reclamando que se estudien sus peticiones en bien del conjunto de los estudiantes del instituto de Villalonga, tanto los de familias normalizadas como los procedentes de los centros de acogidos tutelados.

Apoyo de la Fampa

La protesta en Villalonga ha contado, además, con el apoyo de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de la Comunitat Valenciana (Fampa). Vicent Huet, miembro de la ejecutiva de esta entidad, se situó junto a los representantes del AMPA del instituto Vall de la Safor que reclaman más medios y el fin de las agresiones que se producen a personal docente.