Sin duda que un buen número de espectadores acudió al recital atraído por un repertorio dedicado en especial a la obra del maestro del barroco francés Charpentier. Pero el concierto de anteanoche en la iglesia de Sant Pere de Xàtiva tenía un involuntario reclamo extramusical: una de las integrantes del coro de la Capilla Real de Madrid era Sonsoles Espinosa, la esposa del presidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero. Espinosa, soprano tutti de esta formación coral, pasó gran parte de la tarde en la iglesia junto al resto de los integrantes del coro ensayando "como una más", señaló un técnico que tuvo acceso al interior. Ya por la noche, entre que el concierto era gratuito (sin invitación) y que había numerosos curiosos con ganas de ver en persona a la mujer del presidente, el templo estaba a reventar. Y todo ello pese a que la actuación comenzó cerca de las doce de la noche.
La actuación del coro de la Capilla Real de Madrid en Xàtiva se enmarca en el II Festival de Música Antigua, celebrado en la capital de la Costera el viernes, hoy y mañana. En la orquesta que tocó anteanoche en Sant Pere figuraba uno de los intérpretes de violín más importantes del mundo, el japonés Hiro Kurosaki. El coro estaba situado de frente a los espectadores, en el altar mayor. En el interior de la iglesia no cabía un alfiler (más de 500 personas abarrotaba los bancos y también, de pie, pasillos y capillas). Las medidas de seguridad de la esposa del presidente eran casi imperceptibles: dos hombres vigilaban discretamente el interior, pero no se realizó ningún tipo de restricción. Sonsoles Espinosa vistió de morado y se hospedó en el hotel Mont-Sant de Xàtiva.
